Sergio, el niño que duerme para no sentir hambre

?Sergio tiene 9 años, y a su corta edad conoce de cerca la pobreza, sabe qué es dormir para no sentir el hambre, pero también sabe que estudiando puede salir de la miseria. 

Acaba de concluir el 4º grado de Primaria, y para continuar sus estudios trabaja desde hace unos días vendiendo paletas en las calles del Centro, tratando de juntar dinero y comprar los útiles de él y su hermanita, aunque sabe que el Gobierno le da una parte con Bienestar Escolar, Sergio quiere juntar el dinero para comprar lo que falte… 

?“Yo me dedico a vender dulces para comprar mis útiles y los de mi hermanita, el negocio lo comencé hace tres días y vendo paletas con chamoy, rocaletas, y de piña, la verdad es que me ha ido bien, en promedio diariamente vendo entre $150 a $200 pesos, la idea de que venda paletas fue de mi tío, el me preguntó, desde el inicio no me dio pena”. 

?La historia de Sergio es dramática, durante los últimos fines de semana se tiene que aguantar el hambre, debido a la falta de recursos económicos en su casa... 

“En Umán dan comida en la iglesia de manera gratuita, mi mamá va a buscar comida entre semana, pero los sábados y domingos me aguanto el hambre, para eso tengo que dormir, me duermo como a las 12 del mediodía y me levanto como a las 5 de la tarde, vuelvo a comer hasta el lunes. No suele dolerme el estómago, pero hace una semana si tuve dolores muy fuertes por el hambre”. 

?Aunque no sabe cuánto dinero tiene que juntar para comprar sus útiles escolares, lo recaudado lo guarda en un bote de leche que le sirve como alcancía… 

“Mis útiles escolares cuestan como $400 a $2 mil pesos, actualmente estoy juntando el dinero en un bote de leche, ahí guardo las monedas. Mi mamá no me regaña, no me dice nada”. 

?A esta edad muchos niños en Yucatán salen de vacaciones, suelen ir a una escuela de verano, divertirse, ir al cine, aprovechar sus tiempos libres o bien, ir a la playa. Sergio es consciente de que su vida es diferente, sabe que para ser un ingeniero de la Secretaria de la Defensa Nacional, se necesita estudiar mucho, a él le gustan los números y quiere además ser soldado. 

No sabemos cuántos hombres y mujeres estén oyendo ahora a Sergio, pero confiamos, que por lo menos alguien, levante la mano y lo apoye… 

“Si me están escuchando un montón de “gentes” quiero que me ayuden a juntar para comprar mis útiles, y que Dios los bendiga”. 

?Si usted desea apoyar a Sergio, comuníquese con nosotros, al teléfono 9 24 44 44, o bien puede acudir a las oficinas de Cadena Rasa en la calle 62 por 63 y 65 del Centro. Juntos podemos apoyar a este niño.