La iglesia de Yucatán invita a rescatar las perlas históricas de Ichmul
07 de abril de 2014
El vicario de la parroquia de Peto, presbítero Gaspar Pacheco Cetina, invita a rescatar las perlas históricas y arqueológicas de Ichmul, enigmática comunidad del Sur de Yucatán que reúne todos los ingredientes de una película de Indiana Jones: vestigios mayas, una devoción católica de cuatro siglos, ruinas de iglesias virreinales ricamente ornamentadas, lápidas no decodificadas, cicatrices de la Guerra de Castas y misteriosos restos de objetos que caen del cielo como meteoritos.
En el marco de la Peregrinación a Ichmul, el sacerdote destaca la urgencia de iniciar una investigación profunda que descubra el significado de los símbolos de la fachada de la iglesia antigua del pueblito maya, cuya fe atiende la parroquia de Peto.
"Dentro de la Arquidiócesis de Yucatán representa un terreno inhóspito en cuestión de investigación. Es decir, no sabemos muchos datos que encierra por antigüedad, por arquitectura. Se encuentra también la iglesia antigua que tiene signos, símbolos, fechas, nombres que no sabemos. Además cuenta con su propio cementerio. ¿Qué datos deben haber ahí de personas que estuvieron hace más de 500 años?" indicó.
En una piedra labrada hay una inscripción, en maya y español antiguo, que podrían dar luz sobre el Santísimo Cristo de las Ampollas, imagen oscura que tiene su origen en Ichmul en las primeras décadas de 1600. En esta lápida se pueden leer palabras como sacramento, 65 años, yumil, chichan y nohoch.
Los pobladores saben poco de la historia de su pueblo y del moreno Cristo y lo que conocen son retazos que les compartieron sus abuelos y taratabuelos. Según los vecinos, Ichmul significa “entre los cerros”.
El padre Gaspar Pacheco Cetina señala que sería valioso conocer datos del cementerio colonial cercano a los edificios religiosos e información sobre la virgen labrada en la parte superior de la fachada de la iglesia menos antigua de Ichmul, la cual no es posible ver a simple vista.
En la fachada de la iglesia, la cual se cree se quemó en el siglo XVI y ampolló al Cristo de aquella época, hay letras que tampoco se han podido descifrar. Llama mucho la atención que en esta ruinas no esté labrado el cincho de San Francisco de Asís, como ícono de los frailes que fundaron la primera iglesia en la comunidad.
"La iglesia todo lo que sea cultura, todo lo que sea por el bien de la humanidad siempre estará abierta sus puertas para quienes desea hacer una investigación o jóvenes que quieran hacer sus pininos. Todo lo que nos arroje un dato será bienvenido" comentó.
Informes indican que durante la Guerra de Castas, a mediados del siglo XIX, los pobladores abandonaron Ichmul por el ataque de los mayas rebeldes. En septiembre de 2013, una bola de fuego que cayó del cielo sumó más fama a este pueblo, que sin embargo, clama por recompilar su historia para que hereden las nuevas generaciones.