La decepción amorosa y la soledad, entre las principales causas de suicidios.

La decisión de una persona de suicidarse estaría ligada a la sensación de ausencia de sentido de vida que le ocasiona perder el afecto de una persona, un objeto material o una idea que daban significado a su existencia, reveló la autopsia psicológica de 500 suicidios ocurridos en la ciudad de México.

En 1993, durante su estancia en el Instituto Nacional de Psiquiatría, el psicólogo yucateco Javier Renán García Maldonado descubrió que la “decepción amorosa” habría motivado el 70% de los suicidios entre 500 capitalinos de 18 a 50 años, con edad promedio de 35.

En dos años, García Maldonado entrevistó a padres, cónyuges y familiares de los suicidas para indagar las posibles razones que los llevaron a quitarse la vida.

El sentido de vida de una persona es el soporte interno que le da alguien o algo. Es la razón muy individual para la que vive.

Después del quebranto del afecto de una persona, el desempleo fue la segunda pérdida más importante. En tercer lugar apareció la sensación de abandono y soledad. Le siguió la pérdida de poder o dinero.

El Servicio Médico Forense de la ciudad de México apoyó la investigación de Javier García Maldonado, quien ofrece talleres de autoestima en la asociación Paternidad Responsable.


Para enseñar la tolerancia a la frustración, los psicólogos recomiendan el libro “El hombre en busca del sentido” que narra la esperanza del psiquiatra austriaco Víctor Frankl, quien fue despojado de todo, incluida de su dignidad, en un campo de concentración alemán, donde le arrebataron la vida de su amada esposa.