Incrementa la presencia de infartos en los jóvenes

De acuerdo con especialistas del IMSS Yucatán la edad promedio de mayo incidencia de infartos se encuentra ente los 50 y 70 años, sin embargo, este rango recientemente se ha modificado y ahora es muy frecuente encontrar pacientes de 30 y 40 años, algunas veces incluso más jóvenes, con infarto de miocardio agudo, al respecto habló el Dr. Argimiro Córdova Santiago, Jefe de Cardiología de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) del IMSS Yucatán.

“Algunos de los factores de riesgo que aumentan la probabilidad de presentar un infarto son el tabaquismo, las dietas perjudiciales, la obesidad, la inactividad física, el consumo de alcohol, la hipertensión arterial, la diabetes y la hiperlipidemia, es decir, presencia elevada de grasas en la sangre”.

El síntoma más común de un infarto es el dolor en el pecho, sin embargo, algunas personas no lo presentan, en este sentido el Dr. compartió otros signos de alerta.

“Dolor en uno o ambos brazos; ardor o tensión en el pecho que dura entre cinco minutos o más, molestias constantes que parecen indigestión; presión incómoda en el pecho que se irradia a los hombros, los brazos, el cuello, la mandíbula o la espalda; mareo, desmayos o sudor inexplicable; debilidad, náuseas, vómitos o cansancio sin motivo aparente, así como dificultad para respirar”.

Si se presentan síntomas de infarto es de suma importancia marcar a los números de emergencia, así como solicitar atención inmediata del personal médico para otorgar atención y seguimiento oportuno.

“Para la atención de estos casos el IMSS Yucatán cuenta con el protocolo de atención “Código Infarto” que se implementa en coordinación con los tres niveles de atención (…) , es decir, en los hospitales se activa el proceso de Código Infarto cuando es detectado un caso de Infarto Agudo de Miocardio, este procedimiento implica una secuencia de diagnóstico y atención integral inmediata”.

Finalmente, el Dr. brindo algunas recomendaciones para fortalecer el corazón como: no fumar ni exponerse al humo, mantener una presión arterial adecuada, controlar el colesterol, hacer ejercicio; reducir los índices de estrés y si se tiene algún padecimiento crónico no suspender los medicamentos.