Habrá más movimientos en el tablero del PRI

El PRI no dejó espacio a las especulaciones. El pasado fin de semana dio los nombres de las precandidatos de los 106 municipios del estado, además de dar a conocer  los que buscan un puesto en el Congreso del Estado. Por el momento, Juan José Canul apareció en la lista de los que buscan una curul en San Lázaro, y Jorge Carlos Ramírez Marín en el Senado. No obstante, el aún presidente de la Cámara de Diputados debe solicitar la licencia que le permita dejar su cargo para entrar a la carrera electoral a la senaduría

“Pedí licencia porque me la tiene que aceptar la Comisión Permanente o el pleno en su caso, está medio complejo porque no sé si me la acepta ya que la Permanente se reúne el mismo día del inicio de las operaciones pero me la tienen que aceptar” 

Por el momento se manejan otros cargos que están bajo supuestos escenarios, como el del diputado federal, Francisco Torres…

 “Hay la propuesta de mi partido de ir como plurinominal al congreso, pero seguiré apoyando las decisiones de mi partido y velar porque ganemos”

Puestos en la boleta electoral ya definidos y otros nominales que aún faltan por confirmación. En este escenario, el precandidato a la gubernatura de Yucatán, Mauricio Sahuí Rivero, apuesta a la unidad del tricolor en estos tiempos pre-electorales.

“El PRI está yendo unido fortalecido al interior con un grado de responsabilidad, seriedad para presentar como un único bloque para que Yucatán siga tranquilo, siga creciendo”

En el campo federal, Jorge Carlos Berlín Montero,  el coordinador de campaña del precandidato presidencial, José Antonio Meade, señaló que el abanderado del PRI no caerá en provocaciones de confrontación, al señalar que la estrategia será exhibir los atributos del aspirante a Los Pinos.

“Como es un hombre preparado lo que él está haciendo y seguir haciéndolo es comunicarle a la gente todo lo que podemos hacer, es un hombre que está comprometido con todos los sectores”

Dentro del seno del partido, descartan que haya una operación cicatriz o un descontento por las decisiones del partido en Yucatán.