Una mamá pide ayuda para su pequeña

A principios de noviembre del 2017, Valentina a sus dos años y medio empezó a presentar algunos edemas faciales principalmente en los párpados, síntomas que fácilmente fueron confundidos con conjuntivitis por los especialistas.  

Días después de mantenerse en tratamiento para combatir dicha infección, la mamá de la pequeña, María José  Canto López detectó que en vez de mejorar su situación de salud, se fue complicando, presentando hinchazón en las extremidades y el abdomen, además de aumentar rápidamente de peso.  

“Después de eso, enseguida nos mandaron a hacer análisis de sangre y de orina y a correr todo el mundo, porque nos canalizaron con un nefrólogo que la empezó  a atender con cortisona que es el tratamiento principal para el síndrome nefrótico. Pasaron otros quince días tal vez y dijo el doctor que como era un nefrólogo de adultos, él no podía seguir con el tratamiento de Valentina porque no tenía una respuesta favorable a lo que él le había dado”.  

Al encontrar a un especialista pediátrico, Valentina empezó a recibir un tratamiento vía intravenosa, el cual mantiene hasta el momento, medicamentos y análisis que en general resultan muy costosos y siempre son de último momento.  

Canto López comentó que es necesario trasladar a Valentina, lo más pronto posible a la Ciudad de México para que la valoren y de ahí, les indiquen cuál es el paso a seguir dependiendo su estado de salud, debido a esta incertidumbre, su mamá desconoce la cantidad que necesitarán para los gastos médicos y su estancia, además de que ella sola ha tenido que atender a su pequeña, por lo que se ha visto en la necesidad de dejar su trabajo. 

“Después de hacerle la biopsia el 8 de enero, los resultados arrojaron que la enfermedad está muy avanzada y el diagnóstico es grave. El médico explica que hay cinco niveles de avance de la enfermedad, Valentina lamentablemente tiene ese último que se llama variante colapsante. Es urgente que Valentina sea atendida en un hospital de tercer nivel, porque cada día que pasa, la enfermedad está haciendo de las suyas”. 

La preocupada madre comentó que el daño en el riñón de la menor es irreversible, el diagnóstico apunta a una diálisis y más adelante a un trasplante, pero al ser atendida en un hospital de tercer nivel, existe un abanico de posibilidades en tratamientos que puedan hacer un proceso más lento o que le permita reaccionar favorablemente, mejorando su salud con el paso de los años.  

“Yo no me puedo mover del hospital prácticamente, ella solo me tiene a mi, duermo con ella, yo le doy de comer, yo la baño, ella prácticamente no permite que me aleje. Ahora menos que nunca tengo la posibilidad, ni el horario, ni nada para poder trabajar porque me estoy dedicando a ella al 100% y Valentina al tener esta enfermedad y estar entrando y saliendo de los hospitales prácticamente cada semana, me demanda muchísimo tiempo”. 

Como iniciativa de las mamás de la escuelita a donde asiste Valentina, el próximo 17 de febrero han organizado un bazar en Mi Primer Cole desde las 8 de la mañana. A partir de este anuncio en redes sociales, amigos y compañeros de danza de María José, han creado múltiples actividades para recaudar fondos, para el sábado 10 y domingo 11 de febrero, serán cuatro funciones de danza, de las cuales tres serán en el Auditorio Milne en la calle 10 por 11 de la Col. Santa Rita Cholul en horarios de 8, 5 y 7 de la noche respectivamente y una más el mismo domingo en el Auditorio Cintia Ricalde ubicado en la calle 23 por 20 y 22 de la Col. Chuburná a las 7 de la noche.  

Además habrá otra presentación en el Teatro Daniel Ayala el próximo 14 de febrero.  

Para mayor información de las actividades o si quieres sumarte para apoyar a Valentina, puedes comunicarte con María José Canto al 99 99 68 36 28.