Su discapacidad no ha sido obstáculo para superarse
30 de septiembre de 2013
La Policía Municipal de Mérida (PMM) le abrió las puertas para laborar cuando en otros sitios y otras empresas se las habían cerrado por su discapacidad, Adrián Alfredo Peniche Braga, es ciego de nacimiento, pero eso no ha sido obstáculo para destacar en la corporación donde se ha ganado el respeto y aprecio de compañeros y jefes por su terquedad para salir adelante.
Tiene un lustro en la delegación municipal, ingresó el 16 de julio de 2008, donde es parte importante del control de mando en el área de C-4 y todas las llamadas que llegan del 066 son atendidas de inmediato y las transfiere a la corporación requerida PMM, SSP o la Fiscalía.
Su labor de la que siente orgulloso, ha salvado cientos de vidas, ya que también las llamadas al 066 son de auxilio en caso de accidentes o cualquier situación de peligro que se presente.
En entrevista con Cadena Rasa el agente dijo que estudió en la escuela de invidentes, ya desaparecida, que se ubicaba en la calle 60 por 35 y 33 , y años después regresó a ese plantel para impartir clases de baile, música y matemáticas, con el ábaco especial.
Casado con Higinia Canul Pool, con quien tiene dos hijos, Miriam Goretty y Miguel Adrián, el entrevistado estudió su preparatoria en el CBTA, pero al quedarse sin trabajo tuvo que abandonar los estudios y se integró a un grupo musical Nueva
Sensación donde también labora cuando no hay trabajo en la policía municipal.
Por su trabajo fue invitado al curso de radio brigada y emergencias que convocó la Cruz Roja donde aprendió y perfeccionó aún más su trabajo.
Señaló que sus compañeros lo tratan como una persona normal a pesar de su problema visual, que tampoco fue problema para casarse con Higinia, quien es vidente al igual que sus dos hijo..
El policía explicó que el apoyo de su madre y su esposa ha sido fundamentales para salir adelante, y exhortó a las personas con alguna discapacidad a no dejarse y que aprendan a hacer algo, cualquier trabajo que este sea para ser útil a la sociedad y no ser una carga.
Explicó que sale de su casa a las 6:15 de la mañana deja a sus hijos en la escuela y de ahí viene al centro para estar en la corporación a las 7:30 de la mañana, donde en 5 años, sólo ha llegado tarde en dos ocasiones.
Adrián Alfredo Peniche Braga, es ciego de nacimiento, pero eso no ha sido obstáculo para destacar en la corporación donde se ha ganado el respeto y aprecio de compañeros y jefes por su terquedad para salir adelante.