Secuestran a yucateco en Tamaulipas

El meridano Fernando Alberto Baeza Interián fue secuestrado en el sur de Nuevo Laredo mientras aplicaba una encuesta, lo “levantaron” por la fuerza en una camioneta blanca.

El desaparecido trabajaba para la empresa Velmark, S.A. de C.V, que lo contrató en Mérida y lo trasladó a Tamaulipas, donde laboró durante tres días hasta el 10 de junio cuando fue visto por última vez.

Pablo Portillo, coordinador del grupo de encuestadores al que pertenecía el secuestrado, fue quien avisó a la familia de Fernando Alberto, luego de que interpuso la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público de Tamaulipas.

A pocos días de cumplirse un mes del secuestro, familiares y amigos acudieron a Noticieros Cadena Rasa y por este conducto solicitan apoyo y asesoría de las autoridades locales, ya que ni la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas, ni los directivos de la empresa Velmak han podido darles respuesta sobre el paradero de Fernando Alberto.

Carlos José Baeza Interián indicó que su hermano fue “levantado” por una camioneta que se le acercó después de haber aplicado una encuesta en un domicilio de la colonia San Agustín, de Nuevo Laredo.

“Él estaba haciendo una encuesta en un fraccionamiento de Tamaulipas, le hizo una encuesta a una señora y salió uno de sus hijos a decirle que le estaba preguntando a su mamá, después se asomó una camioneta y le preguntó que si le daban un ‘ride’, y él dijo que no, después dio otra vuelta la camioneta, lo agarraron y lo subieron y de ahí, no se sabe nada de mi hermanito, ya prácticamente el día 11 de julio cumple un mes de desaparecido” 

Pablo Portillo, originario de Monterrey y compañero del desaparecido, manifestó que después del “levantón”, los responsables entablaron comunicación con él y sus compañeros para preguntarles que se encontraban haciendo en la zona.

“Desde la mañana que yo perdí contacto con él, de hecho yo le marcaba muy seguido a Fernando pero ya no me contestaba las llamadas a partir de las 12 del mediodía, como a las seis de la tarde nos comenzaron a marcar, y la última llamada fue conmigo para saber que estábamos haciendo en Nuevo Laredo, después de darle toda la explicación no se quedaron conformes, en ese momento lo tenían ahí detenido. Una vez que les dimos una explicación, no se quedaron tranquilos, escuchamos que lo estaban golpeando, y apagaron el teléfono de Fernando a las 7 de la noche”.

Agregó que los secuestradores ofrecieron liberar a Fernando a las 9 de la noche en una plaza comercial cercana a la zona, pero no ocurrió, los esperaron inútilmente durante varias horas.

Margarita Pérez, amiga de Fernando, dice que la empresa no se ha comunicado con ellos, todo lo han visto a través de Pablo, por lo que piden a las autoridades yucatecas apoyo para encontrar a su amigo que fue privado de su libertad en tierras tamaulipecas.

“Yo me siento desesperada, en primer lugar la empresa no nos ha dicho nada, y nosotros queremos saber, de hecho igual su mamá anda toda desesperada, y por eso le queremos pedir ayuda al señor Ariel Aldecua Kuk de la Fiscalía General del Estado, para que nos apoye con un licenciado que nos oriente en los trámites en Tamaulipas y la búsqueda sea más rápida, porque yo siento que es muy lento y que la empresa no está haciendo nada”.

Ante esa situación, intentamos en varias ocasiones contactar a Clarisa Velarde, directora de la empresa Velmark, con oficina matriz en Nuevo Léon, pero todo ha sido infructuoso.

A la desesperación que lógicamente invade a la familia se une otro problema: carecen de recursos para viajar hasta Tamaulipas y de asesoría legal. Ya temen lo peor, piensan que las autoridades de ese estado le den carpetazo y Fernando Alberto, sin deberla ni temerla, se convierta en parte de la estadística de desaparecidos, por lo que esperan pronta ayuda de las autoridades locales para su búsqueda.