Se encadenará en Los Pinos para ser escuchado por Enrique Peña Nieto
15 de julio de 2014
Tras casi 20 días de haber iniciado una caminata desde el Distrito Federal al estado de Tabasco, y de ahí a Mérida en camión para demandar que se retome la investigación por la muerte de su hijo José Felipe Castillo, ocurrida en el 2011, Marco Antonio Castillo está más firme que nunca y sigue encadenado frente a Palacio de Gobierno para continuar con su protesta que lleva más de 24 horas.
En julio de 2011, el adolescente Felipe Castillo Tzec fue encontrado muerto dentro de una cueva en Valladolid, pendiendo de su propia camisa anudada al cuello. El joven de 17 años, según comenta el padre del menor, presentaba diversos moretones en el cuerpo y rasguños en las manos y una herida de 20 centímetros en la cabeza, lesiones que fueron registradas fotográficamente, pero luego se omitieron en la autopsia de ley y gracias a ello la Fiscalía descartó que Felipe fue víctima de un homicidio.
Según indicó, no ha pensado en retirarse de Palacio, aunque todo indica que será pronto, mas no por miedo u otra cosa, sino para atenderse de una hernia en el estómago que padece y que le fue atendida este martes por elementos de la Policía Municipal de Mérida (PMM), quienes lo vendaron.
“Me voy apenas consiga el dinero para atenderme en algún hospital que no sea Mérida donde me operarán de la hernia”, dijo el entrevistado.
Añadió que le pedirá apoyo al alcalde Renán Barrera Concha para retornar a la ciudad de México donde será intervenido quirúrgicamente y posteriormente se encadenará en Los Pinos para pedirle al presidente que intervenga y se restablezca el estado de derecho en Yucatán.
Informó que el representante de la Secretaría General de Gobierno, Rubén Valdez Ceh, ya se acercó a él para escucharlo para ofrecerle su ayuda e incorporarlo al sector productivo. Este martes nadie salió de Palacio para atenderlo.
"Yo no vengo a pedir sus limosnas a Rolando Zapata Bello que se quede con su dinerito, no vengo a buscar eso, vengo a que se imparte justicia, he comprobado que mi hijo fue asesinado y quien debería estar de mi lado que es la fiscalía para lo cual está facultada, ellos encubren este homicidio yo he demostrado en 3 años que tengo la razón, tengo la firma del gobernador en mi expediente con fecha 3 de octubre de 2013 donde le firmó al obudsman nacional, Raúl Plascencia que le dará cumplimiento, pero de palabra, por es estoy aquí” indicó.
Señaló que la Comisión Nacional de Derechos Humanos, (CNDH), la comisión ejecutiva de víctimas de la subsecretaría de asuntos jurídicos y derechos humanos de la Segob, la cámara de diputados en su comisión de derechos humanos le ha enviado oficios y exhortos al gobernador para que cumpla con esa recomendación y lo ha ignorado.
"Lamento mucho la actitud del poder judicial y sus magistrados y del Congreso del Estado, los diputados de manera omisa ninguno se haya pronunciado porque el ejecutivo del estado no haya cumplido una recomendación. La recomendación fue emitida el 11 de septiembre de 2013, por el presidente de la CNDH, esta información se puede ver en el sitio web de la misma Comisión" comentó.
Artesano de oficio señaló que ha estado recibiendo el hostigamiento de la Fiscalía General del Estado y agregó que quieren intimidarlo, ya que dijo me toman fotos y me ven de manera amenazante.
Pero agregó no tener miedo puesto que ha dormido en la banqueta de la PGR en la ciudad de México, en Bucareli y en la sede de la representación de Yucatán en el Distrito Federal, he luchado y seguiré luchando hasta que se resuelva todo esto.
Entre las anomalías en las que incurrió la autoridad yucateca, destacó el entrevistado está el ocultamiento de distintas heridas defensivas en el cuerpo de su hijo (estas indicarían que fue víctima de homicidio), las cuales fueron ocultadas por medio de un dictamen forense falsificado; además, se comprobó que distintas evidencias fueron robadas del expediente que integró la Fiscalía.