Protestan porque los quieren desalojar

La Unión de Pobladores de Chablekal y el Equipo Indignación denunciaron  un supuesto sistema de corrupción con el que operan las autoridades de la Procuraduría Agraria y el Tribunal Unitario Agrario Distrito 34 que en complicidad con un grupo del Ejido de Chablekal han incluido a empresarios como ejidatarios de la comisaria.

Son 58 los empresarios yucatecos que forman parte de la lista de nuevos ejidatarios de la comunidad, mientras que  a los hijos y nietos de los pobladores esta facultad se les ha sido negada.

 “Poco más de 300 personas naturales de ese pueblo estamos exigiendo el reconocimiento al derecho que tenemos a la tenencia de la tierra y se nos ha negado, sin embargo el Tribunal Agrario ha reconocido a poco más de 60 empresarios de los más ricos de Mérida como ejidatarios de Chablekal, esta es una muestra de cómo están coludidas estas instancias agrarias para que los pueblos poco a poco vallan perdiendo su territorio y que pasen en manos de los grandes empresarios”.

En punto del mediodía del miércoles, varias decenas de pobladores acudieron al Tribunal Unitario Agrario Distrito 34, donde con documentos en mano exigieron a las autoridades ser escuchados y no permitir que sean despojados de sus tierras.

Solicitan que el Tribunal Unitario Agrario acepte la medida cautelar solicitada por la Unión de Pobladores para evitar que los empresarios vendan las tierras a un costo mayor, como suele pasar en estos casos, y que después pasa en manos de nuevos desarrollos habitacionales que cobran gran plusvalía por la ubicación de la zona.

 “Personas habitantes de Chablekal, que no son ejidatarios, porque el ejido ha estado vendiendo sistemáticamente tierras que le pertenecen a la comunidad, esto no es un asunto solo del ejido, es un asunto de territorio, aquí lo que estamos hablando es una acción por la defensa del territorio de Chablekal, parte de lo que hemos cumplido es que las reglas de este proceso, no sean solo del proceso agrario, sino también que tomen en consideración una serie de elementos provenientes del derecho internacional relativo al reconocimiento de los pueblos originarios”.

Los pobladores de Chablekal se enteraron de los nombres, después de solicitar ante el Registro Agrario Nacional la lista de los nuevos ejidatarios empresariales, quienes el 18 de febrero del 2007 hicieron un pago de 7 millones 452 mil 658 pesos al Ejido, como contra prestación por sus aportes para ser reconocidos con la calidad agraria de ejidatarios.

Grupo Indignación de acuerdo con  sus investigaciones señala, que los nuevos ejidatarios empresariales fueron incluidos en la lista de ejidatarios el 28 de marzo del 2007, en la que dicho reconocimiento se realizó con el voto solamente de 11 ejidatarios locales de Chablekal, cuando esto no es posible, ya que en total son más de 300 los ejidatarios y se necesita la mayoría tomar decisiones y hacer validad una asamblea de tal magnitud.

 “No nos hacen caso, yo les invito a todos de que un día nos levantemos aquí y vengamos y derribemos todo este edificio, para que nos puedan hacer caso, para que nos puedan hacer justicia, ya estamos cansados de que la gente, autoridades estatales, gobierno, o lo que sea, creo que son gentes que no conocen de ley, o no conocen de letra, no puede ser posible que teniendo estudios y no hagan caso de lo que pedimos como personas civilizados, queremos que se nos haga caso, vamos a venir a derribar el lugar Magistrado, ya vio que pasa en México, en distintos lugares, cuantas guerras están pasando por la injusticia que hay, estan más preocupados en ganar petróleo, pero la pobre gente que se está muriendo no le hacen caso, lo mismo está pasando en Chablekal”.

Por ultimo denunciaron que el comisariado ejidal, en complicidad con autoridades agrarias, incluso han tomado la parcela escolar y la Unidad Agrícola de la Mujer para beneficiar a los empresarios, pues en fecha de 28 de abril del año 2011, la asamblea general de ejidatarios firmaron un acta para ceder estas tierras  a Helio Alejandro Monforte Jaimes, mismas que por pertenecer a la comunidad y a las mujeres no pueden comercializarse.