Los edulcorantes no calóricos y sus mitos

¿Alguna vez le ha puesto algún sobrecito sustituto de azúcar a su café o alguna otra bebida? Con frecuencia, el uso de edulcorantes suscita debates en torno a posibles riesgos que podría traer su consumo, especialmente en personas con enfermedades crónicas como la diabetes mellitus. Sin embargo, existen numerosos estudios que avalan su seguridad.

El Instituto de Bebidas para la Salud y el Bienestar de Coca-Cola de México ofreció el taller teórico-práctico “El uso y aplicación de edulcorantes no calóricos en la alimentación habitual” a varias personas”. Fue impartido, en la parte teórica, por Carmen Ruiz Monroy, licenciada en dietética y nutrición.

“A veces piensan que son productos dirigidos para personas con sobrepesos, obesidad o diabetes, realmente no es un medicamento y tampoco son parte de un tratamiento, más bien es una alternativa de alimento para tener este sabor dulce en la alimentación o en las bebidas que consumimos, pero sin los efectos metabólicos que conocemos”.

En México se consumen al año 6.42 millones de toneladas de endulzantes, de los cuales el 64% del consumo pertenece al azúcar, el 27% al dulce de jarabe y el 8% a los edulcorantes no calóricos.

 “Lo más importantes o conocidos son en México para su utilización en alimentos y bebidas, son: el aspartame, el acesulfame K, la sacarina, la sucralosa, la estevia y sus derivados”.

En este contexto, resalta que en México los edulcorantes se consideran aditivos alimentarios y, como tales, se someten al proceso de aprobación de seguridad diseñado para los mismos. De acuerdo con la Ley General de Salud, se definen como cualquier sustancia permitida que, sin tener propiedades nutritivas, se incluye en la formulación de productos y actúa como un estabilizador, conservador o modificador de las características del producto al suministrar un sabor dulce.

“El nivel de dulzura de los edulcorantes es más potente, eso ha sido una ventaja, porque con poca cantidad se puede endulzar mucho más las bebidas o los alimentos”.

La doctora y especialista en nutrición dijo que error más frecuente en los hábitos alimenticios de la población occidental es el abuso o consumo excesivo de alimentos y bebidas.

“Efectivamente lo que sucede es que ningún alimento es malo, sino que al consumirlo en exceso causa efectos secundarios”.

Los edulcorantes no calóricos pueden ser una herramienta para aquellas personas que desean tener un control sobre la cantidad de calorías que ingieren diariamente; sin embargo, su uso debe ir acompañado de una dieta adecuada  y una vida saludable.