Los derechos del padre...

En estos tiempos los casos de divorcios suelen ser tan comunes como los matrimonios. Advierten que las demandas de separación suelen ser más complicadas cuando hay niños de por medio, que fueron el resultado del amor de sus padres, pero que al terminar ese idilio, no son capaces de ponerse de acuerdo.

 Debido a este tipo de situaciones surgió la Asociación Lazos Protectores por los Derechos de los Niños AC, la cual fue fundada por Juan Carlos Atrizco Campos, quien vivió una situación similar, al no poder ver a su hija tras una separación…

“Empezamos esto por vivir en carne propia el alejamiento de mi hija. En ese  obscuro de mi vida vimos que hay muchos papás que pasan por lo mismo y nos vimos en la necesidad de enfrentar una lucha”

Atrizco Campos señaló que son muchos los casos como el que vivió los que se encuentran en Yucatán. Algunos de ellos con demandas sin sustentos, pero que son suficientes para que un juez prohíba a una de las partes a ver sus hijos. El fundador de la fundación es acompañado por Javier Cabrera Vermont, Secretario de la asociación.

“Lamentablemente en muchas ocasiones, acompañada la demanda de custodia o de divorcio se anexa una demanda de aparente violencia del progenitor no custodio y eso lleva en el afán de proteger al menor se lleva a una restricción o la suspensión definitiva con el progenitor no custodio  y ahí es el problema”

Vermont también denuncia que existen figuras paternales que obtienen la custodia del infante y no cumplen con la otra parte, y agregó que tampoco hay un mecanismo para hacer cumplir la ley en este tipo de casos

“Aquí también se da el problema que el progenitor custodio tras una orden de un juez familiar, hace caso omiso a esa orden del juez  y no lleva a sus hijos a convivir con su padre o con su madre”

Ambos representantes de la Asociación Lazos Protectores por los Derechos de los Niños, acotaron que esta situación se repite tanto en el estado y con el consentimiento de las leyes, que recordaron que Yucatán es uno de los estados que cuentan con un Centro de Convivencia Familiar, el cual tiene como función de servir de escenario para que un progenitor con restricciones legales pueda ver a sus hijos bajo la mirada de custodios o trabajadores de la dependencia.

“Cuando un juez determina una convivencia en un centro como el que existe en Yucatán, debe ser por un tiempo determinado, las personas que trabajan ahí le envían un informe al juez para que con el tiempo se proceda a una convivencia libre, sana”

Vermoint y Atrizco Campos señalaron que cuando hay más de dos o tres faltas del padre encargado de la custodia, debe producirse un cambio de guardia, pero agregaron que todavía ningún juez de Yucatán se ha atrevido a dar esa orden.