Leyenda de las grutas bajo las iglesias de los pueblos
30 de octubre de 2012
El reciente descubrimiento accidental de una pequeña gruta en el centro de Chicxulub Pueblo consolida las sospechas de la existencia de una enorme caverna prehispánica debajo de la vieja iglesia de Santiago Apóstol.
Una centenaria leyenda asegura que las raíces de una anciana ceiba en la plaza del pueblo esconden la entrada a una red de túneles subterráneos que recorren el piso del templo católico.
Los pobladores más “antiguos” contaban que cuando estaba abierta la entrada de la gruta, dos curiosos habitantes entraron a saciar su sed en la fuente de agua, pero que una corriente los arrastró al fondo y desde ese día nunca nadie volvió a verlos.
Se sabe que durante la época colonial en Yucatán, los frailes españoles construyeron las iglesias y conventos sobre los cenotes sagrados y grutas de los mayas, fuentes de agua que están en los centros de los pueblos.
El nombre primitivo de Chicxulub es “Chac Xulub Chen”, que significa el pozo de los cuernos rojos, una metáfora lingüística que los arqueólogos traducen como “la gruta de las estalactitas rojas”. El descubrimiento de una gruta en Chicxulub revela que las leyendas nuestros abuelos tienen una parte de fantasía y otra inspirada en hechos reales.
Las raíces de una anciana ceiba en la plaza del pueblo esconden la entrada a una red de túneles subterráneos que recorren los pisos de una iglesia.