Labrar piedra: un oficio no muy rentable en Yucatán

Crear esculturas en piedra es una actividad que hasta el momento en Yucatán no alcanza para dedicarse de tiempo completo y poder vivir, al menos esa es la experiencia de Eduardo Humberto Paredes Castillo, quien por su obra denominada Esperanza, recibió una mención honorífica en la VI edición de la Bienal Nacional de Artes Visuales, donde participaron más de 110 de todos los estados de la República Mexicana.

Antes de “reencontrarse a sí mismo en Chichén Itzá”, expresó que se dedicaba a diversos oficios y destacó el de carnicero, sin embargo tras la visita a esa zona mística de la entidad, en la década de los ochentas, decidió seguir sus sueños y ha sido reconocido varias veces por sus obras labradas en piedra.

"Poder vender porque no pido que me regalen, me daría más satisfacción que me compren el trabajo, lo que yo estoy haciendo; tú sabes que este trabajo te puede llevar hasta seis meses, perfeccionándolo un poquito más, mejorándolo, porque por lo menos la piedra que yo trabajo es una piedra muy dura, es laja y tengo que abandonar mi trabajo para hacer otro tipo de trabajo, pues haciendo servicios a veces hago servicios de tacos, pero no hay nada más bonito como que nos dediquemos a lo que nos gusta hacer" indicó.

Al preguntarle sobre la temática de sus obras indicó que prefiere encontrar las formas del mestizaje en la piedra, esta pasión, expresó el artista es algo que no se debe abandonar, por lo que exhortó a quienes estén indecisos para tomar al arte como un estilo de vida a hacerlo.

"Llevan algo, llevan una esencia del autor, siempre van a llevar amor, cariño, ese es el propósito y mandar los mensajes, ¿de dónde me inspiro? del corazón, del alma, lo que es nuestra cultura maya, que tiene que ver con el mestizaje, es una corriente que creo debemos de seguir para no perdernos en esto. Que no lo abandonen es un esfuerzo muy grande el que se está haciendo, pero vale la pena, porque sólo gracias a la escultura podemos mejorar al pueblo, si son sus sueños nunca los dejen, nunca los dejen" comentó.

Actualmente tiene unas 18 obras en exposición en su taller ubicado en la calle 33 x 30 de la colonia Emiliano Zapata Norte, donó una al Museo de Arte Contemporáneo (Macay) y ha participado en simposios de índole internacional, exposiciones y recodó con afecto la ocasión en que el entonces Rector de la UADY, Jaime Barrera Aguilar le compró una escultura de Felipe Carrillo Puerto, dijo, fue uno de sus primeros trabajos.