La soya tránsgenica, una sombra para los apicultores de Yucatán
05 de febrero de 2013
La siembra de miles de hectáreas de soya transgénica en Yucatán es una sombra que amenaza el prestigio de la miel yucateca en el exigente mercado europeo, principal comprador del azucarado local que da de comer a las familias 250,000 apicultores.
Las semillas y plantas de la soya transgénica tienen genes de una bacteria que la hacen resistente a un potente herbicida que usa la compañía estadounidense Monsanto para controlar la hierba entre los cultivos locales, una preocupación frente a los numerosos casos de leche materna contaminada con pesticidas y de mujeres yucatecas con cáncer de mama asociado al uso de estos venenos sintéticos.
Aunque en 2009 fue oficial la siembra de soya transgénica en el estado, desde 2003 se empezó a cultivar silenciosamente el grano en Yucatán, según la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente. Los permisos fueron otorgados por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), dependiente de la Sagarpa.
Se sabe de la siembra de soya transgénica en Santa Elena,Ticul, Oxkutzcab, Tekax, Tzucacab, Peto y Tizimín, cuya producción asustó a los apicultores locales cuando el 6 de septiembre de 2011 el Tribunal de Justicia de la Unión Europea declaró como producto contaminado a la miel que se le detecte polen de plantas modificadas genéticamente. El 95% de la producción mielera del Mayab se exporta a países europeos.
Ante amparos de científicos, productores, asociaciones indígenas y campesinas, y organismos ambientalistas, los tribunales suspendieron el cultivo de la soya en un millón de hectáreas en Yucatán.
Actualmente, el Centro de Investigaciones Científicas de Yucatán (CICY) produce tomate transgénico resistente a plagas locales. La Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente indica que el exceso de herbicidas usados en los cultivos de soya transgénica puede contaminar el agua subterránea y en caso de huracán las semillas pueden dispersarse a 100 kilómetros a la redonda, situación que ocasionaría estragos en los controles de calidad de la miel de Yucatán.
Las semillas y plantas de la soya transgénica tiene genes de una bacteria que la hacen resistente a un potente herbicida que usa la compañía estadounidense Monsanto para controlar la hierba.