La radio social.

Para la industria de la radio es importante y necesaria la definición de la radio social. Actualmente, la radio concesionada tiene un carácter social y para cuidar que así sea, existe una regulación fuerte al respecto. En pocas palabras, la radio está siendo vigilada y por si fuera poco, paga con tiempo y dinero el derecho a existir.
Pero en caso de que se autorice la entrada de estaciones nuevas, bajo el rubro de radio social, con autorización a comercialización y sin la necesidad de cumplir con toda la carga tributaria y normativa, la desventaja para muchas estaciones será insostenible.
Emilio Nassar, presidente del Consejo de autorregulación de la Cámara de la industria de radio y televisión, ha sido contundente al expresar que la inversión en publicidad no aumentará, por lo tanto, al haber más estaciones, varias de ellas se irán a la quiebra.
Los contenidos empezarían a empobrecer y el resultado será la concentración para subsistir en una economía de escala, es decir, las estaciones de radio irán poco a poco, quedando en manos de los grandes grupos, generándose concentración de mercado y por lo tanto, falta de diversidad.
La entrada de la llamada radio comunitaria, con el pretexto de ser radio social, si no se cuida su implementación, si se otorga a vivales y si se les excluye de la reglamentación que rige a la radio comercial, lo único que provocará es una paradoja: "en aras de combatir a los monopolios se destruirá a la radiodifusión local".