La Pascua es la más importante de la Iglesia: Arzobispo

Con motivo de la Pascua, el arzobispo, Gustavo Rodríguez Vega, envió un mensaje en el que recalca la importancia de la resurrección de Jesucristo de entre los muertos, considerada está la fiesta más importante de la iglesia, ya que siglos después, vino la celebración de la Navidad y otras fiestas que se fueron incorporando poco a poco.

Recordó que los primeros cristianos se reunían la víspera del domingo, el sábado al atardecer, para celebrar la Resurrección del Señor. La Pascua era el único día en que se realizaban bautizos, de adultos, de pequeños, pero más bien de familias enteras, así que mientras unos se bautizaban, el resto de la comunidad renovaba su compromiso bautismal.

El arzobispo dijo que La Pascua es primavera, vida nueva de la naturaleza, vida nueva a la que estamos llamados los cristianos y recordó lo que sucedió en aquellos días cuando Magdalena llegó a la tumba de Jesús y la encontró vacía.

 “Mujer, ¿por qué lloras? Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo habrán puesto.” Y el Señor le habla por su nombre: “¡María!” y ella responde: “¡Rabbuní! -que quiere decir Maestro-“. Se acercó a él feliz de verlo vivo y resucitado, diciéndole Jesús: “no me retengas, porque todavía no he subido a mi Padre; Ve y di a mis hermanos que voy con mi Padre que es el Padre de todos ustedes.”

Monseñor hizo mención de ese momento en el que Jesús se presenta ante los apóstoles y les dice que así como el Padre lo envió, así también él  los envía. Y a quiénes perdonen los pecados, les quedarán perdonados; a quíenes no se los perdonen, les quedarán sin perdonar.

Por otro lado pidió que estemos muy atentos ya que hoy en día se han puesto de moda algunas corrientes de pensamiento, por ejemplo, la que habla de la reencarnación.  Porque hay algunos que creen que pueden ser cristianos y creer en la reencarnación. Es algo totalmente opuesto a nuestra fe y dijo el que cree en Cristo, cree en la resurrección de los muertos y no en la reencarnación.

Finalmente comentó que debemos poner nuestra esperanza no en las cosas de la tierra que van a pasar, sino en las que duran para siempre.   

“El amor es la única realidad de este mundo que durará para la vida eterna. Practiquemos el amor y entonces tendremos la vida del Resucitado entre nosotros. Como hijos de Dios, como creyentes en el Resucitado, vivamos en el amor, vivamos siendo expresión de la misericordia de Dios nuestro Señor. ¡Feliz Pascua a todos ustedes!”