Hasta los niños sufrirán el aumento de los precios

La cuesta de enero está afectando a aquellas familias que durante las fiestas decembrinas desembolsaron más de lo que en realidad tenían y además con la entrada en vigor de la Reforma Hacendaria. A algunos no les da para aumentarle la gastada a sus hijos quienes este 7 de enero regresaron a la escuela.

Durante el recreo es normal que, ya sea para satisfacer un antojo o para desayunar, compren galletas o papitas, refresco o jugo y a veces hasta les sobra para comprar unas golosinas.

En el caso de los niños de la escuela primaria Salvador Varela Resendiz, los papás no tuvieron problema para aumentarles este año su gastada a algunos de 10 a 20 pesos, otros de 5 a 10 pesos y unos cuantos, aunque fue mínimo el aumento pero se los dieron.

Lo malo es que con el aumento al precio de los productos chatarra a los infantes no les dará para comprar sus galletas y el juguito y tampoco les sobrará para darse el gusto de comer unas golosinas porque ya todo está caro.

Por ejemplo las papitas favoritas que antes costaban 7 pesos ahora cuestan 8; las galletas chocolatosas costaban 9 y ahora 10; los refrescos de 400 ml de 6 a 7 pesos y, los chicles de .50 centavos a 1 peso.