Entre el entierro y la cremación, los meridanos prefieren ser enterrados.

Hoy en día, además del entierro, la incineración es otra de las opciones para la conservación de los restos de los difuntos, sin embargo para los meridanos no es del todo favorable ya que solamente el 25 % de estos considera la incineración mientras que el 75 % prefiere lo tradicional, el entierro.
Son dos motivos principales por los cuales los meridanos no incineran a sus difuntos, el primero porque desde nuestros antepasados se tiene la costumbre de que los cuerpos deben ser enterrados para que su alma pueda subir al más allá y el segundo motivo es porque la incineración requiere una mayor inversión.
El subdirector de servicios públicos generales Luis Jorge Montalvo mencionó que solamente por el servicio de cremación en Xoclán es de cuatro mil 685 pesos que incluyen los servicios que son ir por el cuerpo, la sala de velación y la caja para la ceniza, ya si los familiares desean depositar las cenizas en las bóvedas que tiene el cementerio el precio por renta de tres años es de 275 y por perpetuidad es de dos mil 68 pesos.
“La gente que acude en un 75 por ciento se le inhuma solamente el 25 se le crema, en gran parte por el costo aunque también hay cuestiones de creencias y de costumbres” comentó.
Actualmente, el horno de cremación no se encuentra en las mejores condiciones, indicó el subdirector, ya que el tiempo de incineración era de una hora y media y ahora dura 3 horas.
“Tardaba hora y media el tiempo de la incineración, entiendo que vinieron de fuera para hacer el servicio y en lugar de ayudarnos pues ya no, es lo que nos dejo la que estaba encargada nos comentaron que algo paso en el servicio que le dieron, ahora ya es más el tiempo” indicó.
Hasta el momento se están haciendo negociaciones con las personas que dieron el servicio en la administración anterior para que chequen el porqué se está duplicando el tiempo de incineración.