En la Opinión de Ronald Rojas

Los principales obstáculos para los presidentes municipales son los laudos laborales. Cada tres años, llega una nueva alcaldesa o un nuevo alcalde a dirigir un ayuntamiento ahogado en deudas por las demandas laborales de los exempleados, ya que cada gobernante llega con su propio equipo de trabajo y se deshace de los colaboradores anteriores. Además, la ley prohíbe solicitar un empréstito para solventar esta situación.

No obstante, sí pueden solicitar créditos para obras públicas.

Ahora bien, en el Congreso del Estado se aprobó una minuta proveniente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en la que se limita a los ayuntamientos a solicitar empréstitos cuyos plazos de pago excedan el tiempo del trienio.

Aunque parece una limitación, el cambio en la ley supone una apertura para solicitar directamente y de manera expedita un crédito a Banobras por el 25 po ciento del presupuesto asignado precisamente para obras.

El cambio en la ley fue trabajado en el Poder Legislativo de Yucatán por el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Wilmer Monforte Marfil, y el presidente de la Comisión de Presupuesto, Patrimonio Estatal y Municipal, Germán Quintal Medina. El proyecto de ley fue aprobado por otros partidos como el PT y Acción Nacional.