Disminuyen en el oriente casos de dengue, zika y chikungunya

Gracias a los trabajos aplicados de combate al mosco durante el 2017 en el oriente del estado se han registrado menos del 68 % de los casos de enfermedades transmisibles por vector en comparación con el año pasado, afirmó el Dr. Rudy Coronado Bastarrachea, jefe de la Jurisdicción Sanitaria #2, con sede en Valladolid.

“Pues lo que hemos notado más un menos, un promedio del 68% menos de casos en relación al otro año, propiamente, en las tres enfermedades que hemos tenido que son: el dengue, chikungunya  y zika, que afortunadamente este año, en mujeres embarazadas hemos tenido muy pocos casos, en el ámbito de la jurisdicción sanitaria hemos tenido ocho casos sospechosos y afortunadamente ninguno salió positivo a zika”

Esto no puede ser posible si la gente no participa, agregó el médico…

“Los éxitos que se obtienen en este tipo de enfermedades que se vuelven tema de salud pública pues es la participación precisamente del  público y pues los que trabajamos en el sector salud sabemos que para impedir la proliferación del virus y la propagación de la enfermedad, pues contamos con dos tipos de barrera, las llamadas barreras físicas y las barreras químicas, en lo popular se conocen como la descacharrización masiva, en la que se pide la participación de la ciudadanía y por varias veces al año, cuatro o cinco veces al año, en el último año lo realizamos en cada uno de todos los municipios se descacharriza por parte de la población, se recogen estos cacharros, se destinan apropiadamente, se deshacen de ellos y esto ha originado que haya menos recipientes donde el mosco en la temporada de lluvias tenga recipientes con agua en donde pueda depositar sus huevecillos”

Coronado Bastarrachea también mencionó que durante todo el año se promovió la campaña Lava, Tapa, Tira y Voltea en referencia a los recipientes inservibles que se almacenan en los patios que deben estar limpios para evitar la proliferación del insecto…

“Y por otro lado, al terminar esta campaña de barrera física que normalmente la hacemos en la temporada de secas para prepararnos que en la temporada de lluvias no haya recipientes que alojen el agua, llevamos también a cabo las de la barrera química, que es la aplicación de abate o larvicida en los reservorios, estanques, botes con agua, etc… que siempre existen, y la famosa… lo que conoce la gente como fumigación que es de dos tipos, lo que es el rociado domiciliario donde utilizamos algunos químicos autorizados por la Secretaría de Salud, y el rociado espacial que es cuando pasan las camionetas en las diferentes colonias para dispersar el producto y matar a la forma adulta del mosco”

Sin embargo, la utilización de químicos en la etapa física de combate al vector tendría repercusiones con el paso del tiempo no solo en la salud de las personas sino en el medio ambiente.

Al respecto, el jefe de la Jurisdicción Sanitaria # 2, comentó:

“Indudablemente, por eso no se hace de manera indiscriminada, sino se hace posterior a realizar las campañas de descacharrización y de patio limpio para que en la medida de lo posible se fumigue únicamente lo necesario, porque lógicamente al utilizar químicos estos se depositan de una o de otra manera en el suelo, en el piso y luego pasar a formar parte del manto freático y somos muy  cuidadosos a esto, además de que el mosco empieza a hacer resistencia a este tipo de fármacos, de manera  tal que en la propia Secretaría ya se tienen los análisis de a qué tipo de insecticidas se están volviendo resistentes los moscos en el Estado de Yucatán”.

La resistencia del mosco a los fármacos utilizados, dijo, se debe a los mecanismos de defensa e inmunológicos que va desarrollando.