Debido al intercambio natural entre el manto acuífero y la costa también es imperante no contaminar el agua salada
28 de junio de 2023
En esta segunda entrega en la conversación con el investigador de la UADY en temas de salud, Javier Perera Ríos, este aseguró que al ser Yucatán un estado con un manto acuífero abundante, también se produce debajo de la tierra las denominadas “corrientes marinas”, es decir, que alguna afectación en el agua de Tizmín puede terminar repercutiendo en Mérida.
“Además de las corrientes de las costas que hacen que estén homogenizando en el agua y ahí empezamos a poder a pensar que la calidad del agua empieza a homogenizarse y esa calidad va a ser la que tengamos en los grifos de las casas.”
Una prueba de ello fue visible en el 2020, tras los pasos de las tormentas tropicales que generó una vasta inundación en el norte de Mérida, cuya agua terminó saliendo por la costa de Sisal, sin embargo, el investigador aseguró que ese intercambio de agua no se produce en una sola dirección, sino en ambas.
“Ese es un claro ejemplo de cómo se da ese dinamismo hídrico en el manto freático, hay un punto de coloración y logra llegar hasta las costas, eso lo podemos ver en esos puntos, pero con los tóxicos no lo podemos ver.”
Perera Ríos, señaló que ese intercambio con el agua salada es visible en lugares cercanos a la costa, al presentarse un color blanco en actividades que se suelen hacer con el agua dulce, o el agua que sale de las tuberías
“En algunas comisarías de comunidades la gente manifiesta una preocupación porque el agua llega más salada, incluso cuando riegan las matas ven que algunas hojas llegan más blancas o también puede ser exceso de sal.”
En este sentido, vale la comparación del estado del agua en estados como Yucatán, donde no hay actividad petrolera con otros estados como Campeche, donde la perforación del oro negro es una de las tareas más constantes y rentables del estado vecino.
Información de
Ronald Rojas
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En la conversación que Notirasa sostuvo con el investigador Javier Perera Ríos, este aseguró que, en ciertas regiones de Yucatán, el agua que corre por las tuberías tiene un porcentaje de salinidad.