Continúa la aportación de pruebas científicas contra dos psiquiatras
19 de julio de 2016
Durante la audiencia pública celebrada este lunes por el juicio que se les sigue a los psiquiatras Pablo Santos García Gutiérrez y Enrique Lara González, acusados del homicidio del doctor Felipe Triay Peniche, continuó la avalancha de pruebas de la Fiscalía del Estado que en esta ocasión presentó un estudio comparativo de las huellas que deja una sierra eléctrica cuando es utilizada para seccionar huesos.
De nueva cuenta compareció la perito en criminalística Aglaee Corona Soto, quien manifestó que dicho estudio se llevó a cabo el pasado día 23 de diciembre de 2014 y se realizó utilizando una sierra eléctrica marca Black and Decker, con un disco dentado de 7 ¼ pulgadas de diámetro, que corresponden a la marca, modelo y dimensiones de la encontrada y ocupada durante el cateo realizado a la habitación que arrendaba el inculpado Pablo Santos, en la García Ginerés.
Detalló que la particularidad que se pudo encontrar en los diversos cortes de hueso que se efectuaron es que en todos se puede apreciar unas “líneas” rectas en orientación a donde gira el disco dentado de la sierra, y filamentos estriados de hueso en el mismo sentido, sin importar que el hueso objeto de estudio tuviera forma redonda, ovalada, semitriangular o semicuadrada.
Cabe recordar que durante la necropsia realizada al cuerpo del doctor Triay Peniche se pudieron encontrar esas mismas características en los huesos de las extremidades que fueron cortados presumiblemente con la sierra asegurada en la casa de Pablo Santos.
Después compareció el perito en criminalística Juan Manuel Rivas Solís, quien se encargó de manipular la sierra eléctrica en el estudio a que se hizo referencia previamente, y relató a los miembros del Tribunal la forma en la cual operó dicha herramienta.
La abogada defensora de Pablo Santos inquirió al perito para que le señalase por qué dicho estudio se realizó con el hueso sin apoyarlo en su totalidad en la mesa de trabajo, a lo que el éste contestó que una vez cortado el hueso podría darse el caso de que dañase la mesa de trabajo al no detenerse a tiempo la operación de dicha sierra.
Por último compareció el perito fotógrafo José Sigfrido Pasos Magaña, quien autenticó las 119 placas fotográficas tomadas durante el desarrollo de dicho estudio comparativo.
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La Fiscalía demostró que una sierra eléctrica hallada en la habitación de Pablo Santos García fue precisamente la que se utilizó para mutilar el cadáver del doctor Triay