¿De dónde viene Santa Claus?

17 de diciembre de 2014

¿De dónde viene Santa Claus?

La Navidad no solo es esperada para festejar el nacimiento del niño Dios, sino también por la llegada de Santa Claus quien les trae regalos a los niños que se hayan portado bien durante el año.

Se ha hablado mucho de Santa Claus, Papá Noel o San Nicolás según la región, por ejemplo del primero que se hace mención en la historia es de Nicolás de Bari, quien nació en el año 280 en el territorio donde hoy se encuentra Turquía.

Se dice que era hijo de una familia de ricos, pero cuando llegó la peste a su localidad arraso con cientos de personas entre ellos sus padres, el joven Nicolás agobiado por el dolor de perder a sus seres queridos, repartió todos sus bienes entre los más necesitados y se fue con su tío que era Obispo, se ordenó como sacerdote y cuando el tío falleció, ocupó su puesto.  

Sobre él se cuentan cientos de historias, destacan sus milagros y la bondad que sentía por la gente pobre. Fue famoso en Grecia, Turquía, Rusia y la actual Francia.

Su relación con los niños y sus obsequios a ellos, nace cuando se percata de que un hombre pobre tiene tres hijas y sabe que no podrá casarlas porque no tienen la dote que se requería, su destino era ser prostitutas o solteronas.

Por eso, Nicolás entró en secreto a su casa y les puso monedas de oro en sus calcetas, que colgaban en la chimenea para que se secaran; cuando estaba por terminar su noble labor, el padre de las chicas lo descubrió y divulgó la historia por todos lados donde fue.

A partir de ahí su fama creció como repartidor de obsequios a los niños, y como esta leyenda hay decenas alrededor de quien con el tiempo se convirtió en San Nicolás de Bari.

En lo que a Papa Noel respecta, se dice que este personaje  perdía fuerza en toda Europa excepto en Holanda. Donde un grupo de emigrantes holandeses localizados en Norteamérica fundaron Nueva Holanda, que más tarde se denominaría Nueva York al pasar a manos inglesas.

Esos emigrantesse trajeron con ellos a su San Nicolás y es que para destacar la historia del casi olvidado personaje, un hombre llamado Washington Irving escribió la historia de San Nicolás en Nueva York en1809, describió la supuesta llegada del santo, sin ropas de obispo, con un caballo blanco que volaba, el relato fue muy popular y todos festejaron la celebración holandesa.

El nombre derivó de San Nicolás, a Sinterklaas o hasta acabar siendo pronunciado como Santa Claus por los angloparlantes.

Una última transformación de San Nicolás en Santa Claus ocurrió el día 23 de diciembre de 1823, cuando apareció un poema en un diario de Nueva York, titulado Un relato sobre la visita de San Nicolás, fue escrito por Clement C. Moore poeta, pastor protestante y profesor de estudios bíblicos en Nueva York, ensalzaba el componente mágico del San Nicolás de Irving y lo hizo más creíble.

Cambió el trineo tirado por un caballo volador por uno tirado por renos. Lo describió como un tipo alegre, rechoncho y de pequeña estatura, parecido a un gnomo. Moore situó la llegada de Santa Claus, en la víspera de Navidad. La imagen del gordo Santa Claus la detalló al máximo el dibujante Thomas Nast, quien era un caricaturista político, que por Navidad publicó ilustraciones de Santa Claus en la revista Harper´s Weekly de 1860.

Nast añadió detalles como ubicar el taller de Santa en el polo norte, y su vigilancia sobre los niños buenos y malos de todo el mundo.

El éxito fue arrollador y una nueva imagen de Santa Claus, vestido de rojo, con gorro y botas altas saltó a todas las revistas infantiles y periódicos de su tiempo.

Y es así como hasta el día de hoy la llegada de Santa a los hogares sigue causando una gran ilusión en los niños, quienes escriben una carta para pedir el juguete de su preferencia. Se dice que a aquellos niños que no se portaron bien en lugar de juguete les deja un pedazo de carbón.

A este personaje se la ha dado forma a través del tiempo y la cultura de cada región.

actualización página web