Viviendas verticales suponen un cambio cultural en Yucatán

25 de agosto de 2014

Viviendas verticales suponen un cambio cultural en Yucatán

Las unidades habitacionales verticales ya son un hecho en Yucatán. A pesar de que mucho se habló acerca del resultado que tendría la demanda de estas viviendas, ya que en años anteriores tuvieron una recepción limitada.

Sin embargo existen algunas cuestiones asociadas que no se pueden perder de vista. Alfredo Alonzo Aguilar Profesor de la Facultad de Arquitectura, de la Universidad Autónoma de Yucatán, nos habla un poco al respecto.

"Por un lado la tradición, la cultura yucateca que se ha hablado en muchas ocasiones, de que la población aspira tener una vivienda de un nivel, dos niveles, porque con esto está asociado también el hecho de tener un patio, tener un garaje y tener la posibilidad de que en el patio hayan árboles, donde tener animales, en cambio el vivir en una vivienda vertical supone un cambio de cultura, no se puede tener un lugar donde tender la ropa, un espacio donde tener animales, donde tener árboles frutales" indicó.

 

La dinámica de la vida en Yucatán ha cambiado, hoy en día existen personas que no necesariamente quieren una vivienda con esas características y son ellos precisamente los que podrían ser los principales ocupantes de estas unidades habitacionales. Como por ejemplo parejas jóvenes y gente soltera.

 

Alonzo Aguilar subraya que existen diversos factores de planeación urbana que deben considerarse para que estas unidades habitacionales verticales sean funcionales.

"Es necesario que hayan suficientes espacios públicos, áreas verdes y parques para que acudan allí los niños, los señores que necesiten hacer ejercicio, caminar, que viven en esos edificios, entonces, el hecho de construir este tipo de vivienda, significa otras consideraciones de planeación urbana, significa otras consideraciones de cómo se utilizan los servicios urbanos en la ciudad y entonces, si hay suficientes parques, si hay suficientes áreas verdes, si la dotación de agua y energía eléctrica es adecuada, entonces esos edificios funcionan bien, si no es así, entonces hay problemas" comentó.

Por último comentó que debido a que estas construcciones son recientes y algunas no se han terminado de habitar no se puede saber a ciencia cierta el impacto positivo o negativo que tienen estas viviendas.

Aseguró que no existe una casa ideal específica para los yucatecos, ya que a lo largo de su vida, sus necesidades y cambios en su vida familiar son las que definen el tipo de vivienda que ellos necesitan.

Las viviendas verticales serían habitadas por un público específico como las parejas jóvenes y gente soltera.

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