Reportan problemas de inseguridad en el Barrio de Santiago

El emblemático Barrio de Santiago, un lugar que sobresale por su gente, sus gremios, sus icónicas fachadas y su singular mercado ubicado a un costado de la iglesia cuyo santo patrono da nombre a la zona, tiene un problema, la inseguridad, y al parecer va en aumento.

Desde hace unas décadas, las casas dejaron de albergar a familias, y se convirtieron en comercios, muchas de ellas fueron vendidas a extranjeros que después de remodelarlas con los más finos acabados, llegaron a la ciudad a habitarlas y vivir sus últimos años.

Los vecinos casi ya no se conocen, son nuevos y no se hablan, no saben a qué se dedica el de enfrente, dando pie a que se debilite el tejido social.

De acuerdo con los santiaguenses, por el día  todo es tranquilidad, pero por las noches han comenzado a proliferar los asaltos.

“En las noches hay más problemas, falta vigilancia, hay mucho borracho y robos a los transeúntes, los ladrones son gente de fuera, los vecinos somos tranquilos y nos conocemos”.

El Barrio de Santiago alberga a varios comercios dedicados a la venta de alcohol.

“Antiguamente no había tantos bares, ahora hay varios como: la Vizcaina, la Pulquerida, la Malavida, el Beso de la Flaca, y la verdad no sé si los gerentes pagan para que no entre a la zona la policía, porque los fines de semana a partir de las 12 de la noche no ves a ningún policía”.

En días pasados, en la calle 65 por 72 y 74 de ese lugar, una mujer denuncio que le habían robado su automóvil, días antes un hombre señalo la misma situación cuando salió del comercio y no encontró su motocicleta.

“A mí me vinieron a interrogar unos policías y me preguntaron por el robo de un automóvil, la verdad sólo de ese me enteré”.

La zona también alberga a muchos indigentes, que aprovechan dormir en el parque a un costado de la iglesia, señalan los vecinos.

“Varios borrachos se quedan a dormir en el parque, una vez me enteré de un asalto a una señora, pero la verdad no supe más, hay zonas poco iluminadas”.

Por los habitantes del Barrio de Santiago, exigen  a las autoridades a vigilar más la zona, y no esperar que el problema aumente y se salga de control.