Reforma Fiscal, duro golpe a sector restaurantero

Alvaro Mimenza Aguiar, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC), hablo acerca de la posibilidad de tener un acercamiento con los vendedores ambulantes, como en días previos realizó la Cámara Nacional de Comercio con el programa “Crezcamos Juntos” del Ayuntamiento de Mérida y el SAT, el cual busca formalizar a los comercios.

“Por supuesto que nos encantaría impulsar este tipo de programa la pregunta aquí es ¿va generar resultados este programa o no va generar? Hoy yo no lo sé, tengo mis dudas ¿por qué tengo mis dudas? Porque la Reforma Fiscal que se hizo está en sentido opuesto a la competitividad y de hecho lo que está provocando es una mayor informalidad, si nosotros hablamos de un comercio, 6 de cada 10 negocios que existen son informales, pero si nosotros solo hablamos del sector de alimentos o del sector restaurantero, estamos hablando que 9 de cada 10 unidades que expende alimentos y bebidas son informales” comentó.

Aseveró que los resultados de este programa no se verían ni en este año ni el próximo, mínimo habría que esperar 3 o 4 años.

De igual manera hizo hincapié en que el principal problema se debe a la Reforma Fiscal, la cual ha tenido repercusiones para el sector restaurantero

“Definitivamente la reforma fiscal tiene que desaparecer, entonces definitivamente hay que hacer un borrón y hay que hacer una nueva Reforma Fiscal, definitivamente no ha funcionado la reforma fiscal, no funcionó, seguimos estancados, el sector restaurantero desde septiembre de 2012 comienza la disminución del consumo, en septiembre del 2014, en pláticas con varios restaurantes que están afiliados, tuvieron en ventas su peor mes histórico desde que abrieron varios restaurantes de 2 años, de 3, de 5, de 10 años, su peor venta desde que abrieron se dio en el mes de septiembre del 2014, dos años después de una reforma fiscal, quiere decir que esa reforma está en sentido contrario, hay que eliminarla por completo” indicó.

Por último afirmo  que si bien por ahora le preocupa la recesión, lo que más le alarma es que pueda venir una crisis, ya que esta situación haría quebrar a los  negocios, que es lo que le da vida y le genera empleos a un país.