Ramadas, tradición que se niega a morir

Hemos entrado al último mes del año y en las calles, desde este 1 al 16 de diciembre por lo general salen a las calles grupos de niños con cajas de zapatos decoradas con papel navideño que llevan la imagen de la Virgen de Guadalupe o del Divino Niño, una veladora y una lata. 

A esta tradición se le conoce como las ramadas, en donde los menores recolectan dinero que utilizan ya sea para su posada o para satisfacer algún gusto personal.

Con días de anticipación se juntan para planear cuál será su ruta a seguir, es decir de qué calle a qué calle abarcarán; juntan los aditamentos necesarios para poder armar sus cajitas y salir a las ramadas. Algunos salen acompañados por un adulto, otros salen con sus amigos y no falta el que prefiere salir solo.

De acuerdo con las celebraciones católicas, las ramadas son parte de la preparación para recibir la navidad y con esta el nacimiento del niño Jesús. Con base a la información proporcionada por el vocero de la Arquidiócesis de Yucatán, padre Jorge Oscar Herrera Vargas, los niños salen a partir del 1 de diciembre hasta el 16 con el fin de juntar dinero para poder realizar las posadas.

Explicó que cada uno de los elementos con los que salen los niños tienen un significado: la vela es la luz de la fe y las ramas son la esperanza y la vida.

Demian es un niño de 12 años que desde hace 4 sale a las ramadas y disfruta hacerlo con sus amigos porque asegura pasar un momento agradable y sano con ellos. Durante su recorrido han llegado a visitar hasta 10 calles juntando un total de 159 pesos por día y lo dividen entre los seis que salen a la ramada. Algunos lo utilizan para jugar maquinitas y otros, como él lo gastan en sabritas o simplemente lo guardan.