Presunta amenaza de contaminación en el fraccionamiento los faisanes de Tixcacal

Unas 100 familias que actualmente habitan el fraccionamiento Los Faisanes de Tixcacal, viven con miedo de estar respirando aire contaminado debido a que desde hace un par de meses, a tan solo unos escasos metros de sus hogares, se comenzó a construir una fábrica presuntamente de plásticos, que por las noches libera unos gases que cubren dicho fraccionamiento y, por las mañanas se puede apreciar que una capa de residuos de color blanco que envuelve sus hogares y automóviles.

Preocupados por la salud de los niños y personas adultas que ahí viven, han acudido tanto al ayuntamiento de Mérida –al cual pertenecen- así como a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Media Ambiente (SEDUMA), para solicitar dos cosas, principalmente: conocer si la fábrica cuenta con los permisos pertinentes para ser edificada en esa zona, ya que se encuentra a tan solo 1 metro de distancia del patio trasero de la última fila de casas del fraccionamiento y en segundo lugar, desean que la SEDUMA realice un estudio para saber si los gases que emanan de la misma son o no contaminantes y por consecuencia perjudiciales para la salud.

Vecinos de Faisanes hablaron del problema:

“Lo que necesitamos saber es lo que estamos respirando y tener la seguridad de que no ocurra ningún accidente porque estamos pegados a ellos, porque esos tanques que están ahí y que no tienen ningún señalamiento, no sabemos que contienen…” señaló.

“En las madrugadas se escucha como se abre una válvula donde se escapa un tipo de vapor y enseguida se siente el olor de plástico quemado y es tan fuerte que hiere la garganta y los ojos y pues estamos preocupados por la salud de nuestros hijos…” indicó.

Fabiola González, Gerente de ventas del desarrollo indicó que se sorprendieron mucho cuando la construcción comenzó, ya que ellos cuentan con el permiso para la realización de un desarrollo habitacional desde 2010 y algunas familias tienen ya más de 3 años viviendo ahí por lo cual debería haber un antecedente que les indique a las autoridades que esa zona no es para desarrollo industrial.

”Al igual que para los habitantes del fraccionamiento nos cayó de improvisto, no contábamos que hagan una fábrica de plásticos, los dueños están enterados y están preocupados por el disgusto de los ciudadanos y nos viene a afectar a nosotros porque todavía estamos comercializando…” dijó.

Los preocupados vecinos señalaron que desde que los trabajos iniciaron las personas que ahí viven se han enfermado con mayor frecuencia, se incrementaron los casos de infecciones en la garganta e incluso brotes de conjuntivitis y lo atribuyen a los “químicos” que se desprenden de la fábrica y que les llegan hasta sus hogares.

Como medida de prevención, prácticamente se han aislado, cierran puertas y ventanas todo el día y la noche y no dejan salir a los pequeños a las áreas recreativas por precaución.