Por falta de vocación, cerrarán un convento

En 1945, la Congregación de Religiosas de la Cruz del Sagrado Corazón de Jesús se asentó en Mérida y se ubicó en el Fraccionamiento de Chuminópolis. Hoy, luego de 72 años, se anuncia su cierre por falta de religiosas. Ya en sus estéticos pasillos, en su verde jardín, o en su pequeña capilla con la imagen de la virgen de Guadalupe, ya no se aprecian tantas hermanas como antes.

Ante esta realidad, la madre Mónica Acosta recibió la notificación por parte del Consejo General del Instituto, que pronto tendrán que cerrar sus puertas….

“La noticia la recibimos el 10 de septiembre de este año y a partir de entonces empezamos a dar la noticia. Primero al Arzobispo. El 21 de noviembre tendremos una eucaristía en la Catedral, primero agradecer por la gracia de los 72 años y un cierre oficial” 

Las madres de las Religiosas Cruz señalaron que las razones del cierre pueden ser diversas. Pero la principal, es que ya no cuentan con el mismo número de monjas, que en años anteriores. Así lo explicó la madre Laura Linares, Vicaria General de la Congregación. 

“La falta de vocaciones, tenemos una población de hermanas mayores enfermas, y ahora tenemos poquitas jóvenes y se cargan de trabajo. Tenemos que reforzar para que puedan llevar su vida contemplativa” 

Es decir, las jóvenes de la actualidad no tienen el mismo interés de llevar una vida religiosa, tal como ocurría en tiempos de antaño. La madre Acosta explicó esta situación desde un punto de vista teológico. 

“Jesús es quien seduce. Las maneras, los modos de cómo llevamos esta vida. Algunas de ellas es la vida contemplativa, es una audacia entregarse a este tipo de vida” 

La Madre Linares informó que este problema no es solo del convento de Mérida, sino esta disminución de las religiosas se repite en distintas ciudades donde se encuentra presente la Congregación. 

“Cuando yo entré hace 30 años eramos más o menos como 400, actualmente somos como 200. Tenemos casa en México, una en Estados Unidos, Roma, Honduras y Costa Rica” 

Además, La vicaria de la Congregación informó que ya tuvieron cerrar una casa en Costa Rica, Culiacán, Durango y Madrid, en España. En el convento de Mérida, solo conviven 10 religiosas.