Pide ayuda para alimentar a su familia

Aunque sea por el hilo telefónico, Ana Beatriz Xuluc transmite su angustia, y no es para menos, esta yucateca que vive en Valladolid tiene una sola pierna y la otra extremidad a simple vista, cualquiera puede notar que corre un grave peligro. En ella, presenta profundas heridas y una gran inflamación.

Doña Betty, tal como la llaman en la colonia Fernando Novelo, tiene tan solo 37 años de edad, debido a que tiene una sola pierna y a otras heridas, no puede ponerse de pie, por lo que su día transcurre a bordo de una silla de ruedas. Tal como ella misma lo explica, esta rutina le ha causado un gran daño…

“Yo me paso todo el día en una silla de rueda, la silla me empezó a comer, entonces se me hizo un hoyo, tengo la llaga, y tengo la pierna igual, enllagada”

Ana Beatriz ya programó su ingreso al hospital con el objetivo de salvar la pierna que le queda. No obstante, ante esta situación, necesita la ayuda de sus familiares o amigos, para atender a su pequeño hijo, que aún no cumple los dos años de edad.

“El lunes yo me ingreso o que pasa, que como tengo un hijo estoy viendo dejar con mis familiares. Que me cuiden a mi hijo para que yo me pueda ingresar, para ver qué me van hacer en el hospital general de Valladolid”

Betty, o Ana Beatriz, ya no puede atender los quehaceres del hogar, si llegará a ser intervenida, tampoco podrá cuidar a su descendiente. Todo esto llevará a su esposo, a abandonar su profesión como albañil, para hacerse cargo tanto de Betty como del pequeño de la casa…

“Yo estoy pidiendo ayuda, debido a que mi esposo va a dejar el trabajo para cuidarnos. Entonces, yo estoy pidiendo ayuda para nosotros poder comer, para eso es la ayuda”

La afectada considera que las llagas son producidas por el roce de la silla con su piel, y dado el antecedente médico de la otra extremidad, podría tratarse de un caso similar, lo que la llevaría a enfrentarse a otra amputación

“La pierna empezó como un callo, cada vez que iba al hospital me lo raspaban me lo raspaban, y el pie se deformó. Luego me empezó a salir materia, con un olor insoportable y luego dijo el doctor que no la podía salvar y me la amputaron… tengo miedo de perder la otra pierna”

La desesperación y el temor cada vez son mayores, es por ello que solicitan cualquier tipo de ayuda económica o en especie para que su familia pueda salir adelante mientras ella se encuentra en el hospital y su esposo sin poder trabajar.

En caso de contar con algún recurso que pueda ser de utilidad,  pueden hacérselos llegar a la calle 28, entre 21 y 23, de la colonia Fernando Novelo en Valladolid, o también pueden comunicarse al teléfono 985-1050-999