Pescadores se manifiestan en los bajos del Palacio de Gobierno.
25 de abril de 2013
El problema del pepino de mar regresó a Mérida. Unos 400 pescadores de Sisal y Celestún, en grupos separados, estuvieron este jueves en horas de la mañana y mediodía frente al Palacio de Gobierno para protestar porque los permisos que les fueron otorgados para la captura son insuficientes.
Unos y otros, los de Sisal a las 9:30 de la mañana y los de Celestún a las 3:15 de la tarde, fueron recibidos por el sub secretario de gobernación Carlos Sobrino Argáez quien ofreció contactarlos con el Gobernador Rolando Zapata Bello en busca de una solución al problema, la cual hasta las cinco de la tarde no había ocurrido.
En marzo pasado, grupos de pescadores de la zona costera del Estado estuvieron en una ruidosa manifestación frente al palacio de gobierno para protestar por la veda impuesta a esa pesquería y por los frecuentes decomisos y encarcelamientos de los hombres de mar.
José Alfredo Díaz, pescador de Sisal, explicó que tan solo el pasado 2012 se le entregó a la cooperativa donde él trabaja, “Pesqueras Cualitas”, 6 permisos para 16 socios, pero en esta ocasión solamente les dieron 4.
En el caso de Celestún, Manuel Solís, pescador independiente, mencionó que en ese puertos hay unos 4 mil pescadores y solamente les otorgaron 80 permisos, los cuales no dan abasto para todos ellos.
A diferencia de la manifestación de pescadores en el mes de marzo, en esta ocasión la protesta fue pacífica, sin pancartas ni gritos, pero con la intención de cerrar las calles si no se les daba una respuesta.
Aproximadamente unos 400 pescadores se manifestaron la mañana del jueves frente al Palacio de Gobierno para protestar que los permisos otorgados fueron insuficientes.