Peligra la calidad del agua en Yucatán

12 de mayo de 2021

Peligra la calidad del agua en Yucatán

Parece ser que la profecía de la guerra por el agua cada día está más cerca, ya que según los especialistas, en la Península de Yucatán peligra la calidad del vital líquido, muestra de ello es que el semáforo hídrico está en amarillo, mientras que en 15 Estados de la República ya están en rojo. 

De acuerdo con el ingeniero Rogelio Pérez Monreal esta situación es multifactorial, ya que independientemente del cambio climático, el ser humano le está dando mal uso a este recurso, como por ejemplo: vaciar las cuencas y llevar el agua a las zonas metropolitanas donde más escasea. 

“Por ejemplo en algunos lugares la falta de agua en zonas metropolitanas urbanas simplemente hace que se garre agua de otro lugar, por ejemplo si yo tengo una cuenca de un rio que desemboca en el Atlántico y por la falta de agua en la CDMX, pasó esa agua a otro lugar, y después la descargo al Pacifico en lugar de regresarla al Atlántico otra vez, es decir los seres humanos estamos modificando la naturaleza del ciclo hidrológico” 

El especialista indicó que estamos contaminando el manto acuífero con agentes externos provenientes de las ciudades, tales como: detergentes, aceites, químicos, los cuales impactan de manera significativa; uno de los ejemplos más claros de esta situación en Yucatán fue el descubrimiento de medidores de electricidad, los cuales contienen químicos corrosivos, en el cenote Chen-Ha. 

“Agentes externos como detergentes, lodos, etc., lo tiramos y lógicamente llega al acuífero, tenemos un acuífero muy permeable, ósea el agua lo va a recoger y se va para abajo y lo estamos contaminando las famosas fosas sépticas las confundimos con sumideros, una fosa séptica es un sistema para tratar las aguas y un sumidero es un simple hoyo donde el agua se va, metemos al pozo todo lo que recoge, polvo excreta de perro, de gato, hules aceites” 

Rogelio Pérez  indicó que si seguimos así en los próximos 25 años podríamos  tener problemas similares a los de la ciudad de México, no tanto por la cantidad de agua, sino por la calidad, por eso es importante respetar la naturaleza de sus procesos y ciclos para tener recurso de calidad, a la par de cuidar el agua y no desperdiciarla, para que el llamado “Día Cero” por estrés hídrico no llegue a Yucatán. 

Otro ejemplo de esta crisis, es lo que ocurre en Tampico y Madero, en Tamaulipas, donde hay escasez de agua por la alta salinidad en el manto acuífero, entre la sociedad hay compras de pánico de agua embotellada o de garrafón; la psicosis es tal que algunos negocios han cerrado por días debido a que los anaqueles de agua purificada están vacíos.

información de:

Rigel Alonzo

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