"La soberbia del cuarto poder..."
02 de agosto de 2021
Cada 7 de junio, los que nos dedicamos al periodismo recordamos con regocijo la fecha que conmemora la Libertad de Expresión. Realmente desconozco si los abogados, los contadores y otras profesiones recuerdan con tanto júbilo como lo hacen los periodistas, la efeméride de esos destacados oficios. Nos montamos sobre una ola y creemos que estamos en la cresta del mundo. Como dice la oración, lo confieso ante el Dios todopoderoso.
El periodismo es el denominado cuarto poder. Ser representante de un poder nos otorga una cuota de soberbia y la soberbia es más un pecado que una virtud. Un entrañable jefe de redacción, de nombre Ramón Hernández, me enseñó que por ser un poder no le podía decir “excelentísimo” al embajador y su santidad al “Papa”, porque sería colocarnos debajo de otro poder. Si no es soberbia es algo muy parecido.
Esta introducción es porque el viernes me llevé un reproche, el cual fue valido y acertado por parte del señor Aarón Hernández, padrastro de Teresa Vega Cuellar, la mujer que fue víctima de un feminicidio, cometido por tres personas que ya están siendo procesadas.
Don Aarón se identificó como el esposo de la mamá de Teresa y por menester de este oficio, le tuve que preguntar por el estado de ánimo de su cónyuge. Una pregunta obvia, que tenía una sola respuesta y la que generó un hombre, un hombre en la máxima expresión de su palabra, que llora y que acompaña el dolor de su esposa…
“Deshecha, no me preguntas más eso, como se sentiría una madre cuando le mataron a una hija”
Don Aarón en su condición de “caballero” continuó con la conversación con el micrófono apagado con su interlocutor que le hizo la pregunta prohibida. Quizás, pese al dolor, reconoció que la interrogante cabía en la conversación. Lo que no aceptará, es que los responsables del feminicidio de Teresa no cumplan la condena.
En este mundo de preguntas y soberbia, sólo me toca citar a la misma oración, “he pecado en pensamientos, palabras y obra”.
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Ronald Rojas
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Opinión de Ronald Rojas