La sequía mata a las reses de hambre o por exposición a las fuertes temperaturas

Debido a la época de sequía por la que actualmente está atravesando el estado, los productores de ganado, que son alrededor de 3 mil, se ven severamente afectados, ya que sus reses están en riesgo de morir por hambre y por la prolongada exposición al sol y las altas temperaturas.

Lo anterior, explicó el Coordinador de la Dirección de Ganadería de la Secretaría de Desarrollo Rural, Miguel Cervantes, se debe a que el intenso sol y la escasa o nula presencia de lluvias, seca los campos hasta dejar muertas a la mayoría de las plantas que son para consumo del ganado, es por ello que los productores debe recurrir a la compra de alimentos fortificados, en un intento de mantener vivos a sus animales, sin embargo, significa un gasto extra, que en muchas ocasiones no pueden realizar.

“Cuando se presenta una sequía como en este momento se está dando el productor tiene que comprar alimento para que sus animales no se mueran, todos tienen que invertir para que animal no se muera, porque no hay pasto” señaló.

El 80% de los productores de ganado en Yucatán son pequeños o medianos, que tienen en promedio 20 animales, quienes dependen en un 100% de las condiciones climatológicas para desarrollas su actividad, ya que se les conoce como ganado de pastoreo y, aunque en esta época de sequía cuentan con posos para acceder al agua, esta solo es suficiente para el consumo, puesto que si la utilizaran para regar, el líquido no daría abasto.

El funcionario agregó que las reses que logran sobrevivir, cuando las lluvias regresan, están muy malnutridas, por lo que el ganadero no puede venderlas y debe conservarlas un mayor tiempo para poder volver a engordarlas, lo que significa más pérdidas.

Actualmente, el Gobierno del Estado, a través de la Secretaria de Desarrollo Rural está implementando un programa en apoyo a los productores, con la entrega de 3 mil toneladas de alimentos fortificados, para que puedan sobrellevar los siguientes meses de la sequía.