La pandemia por coronavirus es un reto, pero también una oportunidad para la fe

09 de noviembre de 2020

La pandemia por coronavirus es un reto, pero también una oportunidad para la fe

Consciente de que la pandemia de coronavirus ha venido a cambiar la forma en la que nos relacionamos, el padre Luis Alfonso Rebolledo Alcocer, rector del Seminario Conciliar de Yucatán, ve esta adversidad como una oportunidad para agradecer a Dios el don de la vida y también una oportunidad como sacerdote, de renovarse…

“En los retos, en los momentos en los cuales sentimos obstáculos, verlo como una oportunidad. Yo suelo decir que los seres humanos podemos crecer en base a los retos, donde vemos de qué estamos hechos y donde pueden salir las potencialidades. Estos obstáculos no son para caernos, la palabra crisis es oportunidad para renovarnos, salir purificados y triunfadores”

Al cumplir 17 años de servicio, el sacerdote señaló que agradece a Dios el amor que ha encontrado en él…

“Creo que año con año he notado que la alegría de ser sacerdote es más sencilla, hoy siento que la fuente de mi felicidad no está en mis cualidades y dones, sino en el amor gratuito de dios”

Y es que ese es el principal mensaje que le dio a los fieles, el ser agradecido inclusive en momentos difíciles como los que nos toca vivir. También indicó que dentro de esa gratitud, está el poder seguir llegando a los creyentes, ahora a través de las diferentes tecnologías con las que se cuenta…

“Lo digital es un nuevo método para evangelizar, tenemos que seguir transmitiendo el evangelio de la vocación. Tenemos que adaptarnos a los nuevos tiempos. Lo digital nunca va a suplir lo presencial, el contacto humano, mirar a los ojos, pero en estos tiempos de reclusión bendito sea que tenemos las herramientas, estos medios que permiten que puedan seguir participando de la Eucaristía”

Por ello el presbítero invitó a no desanimarse ni bajar la guardia, seguir cuidándonos y protegiendo a nuestros seres queridos.

De igual manera invitó a estar al pendiente de próximos eventos, como el pasado Seminariothon, el cual fue todo un éxito y rompió sus expectativas.

 

El sacerdote cumplió 17 años al servicio agradeciendo por la vida pero también emitiendo un mensaje de aliento para todos aquellos quienes han perdido algo o pasan por una situación complicada.

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