La ludopatía, cuestión de la conducta y no del juego en sí: Ariel Lugo Rodríguez.

“Todo está en la mente, jugar una o dos veces no afecta a nadie, solamente cargo mi tarjeta una vez más y esta será la vencida porque recuperaré lo que ya perdí” estas son algunas de las frases que comúnmente enuncian aquellas personas que se la viven en los casinos.
La ludopatía como adicción es cuestión de la conducta y no del juego en sí, según los expertos existe una clasificación para aquellas personas que gustan del juego, en primera instancia están los jugadores sociales que es aquel que juega por entretenimiento dentro de un marco de relación social y que tiene un control del juego. El jugador problema es el que juega de manera habitual, cada vez tiene menor control sobre el juego y crea problemas ocasionales en el área laboral, familiar y social y en tercer lugar está el jugador patológico, el ludópata, se caracteriza fundamentalmente por la pérdida del control sobre el juego, deteriora sus relaciones y su único objetivo es tener el juego perfecto.
El Director de Salud Mental Ariel Lugo Rodríguez explicó que cuando una persona empieza a modificar su funcionamiento habitual, es decir dejar de hacer cosas que le gustaba por ir a jugar, se puede decir que ya tiene un problema con el juego.
“La ludopatía como adicción es cuestión de la conducta y no como el juego en sí. Hay tres tipos identificados de jugadores identificados, el jugador social juega por entretenimiento, el jugador problema, puede crear problemas ocasionales y el tercer tipo de jugador es el patológico” comentó.
Desde temprana edad los niños pueden adquirir una adicción al juego debido a los tantos espacios en donde muchos hacen festejos y las máquinas que en el lugar se tienen son llamativos a la vista de los niños.
“Y esta es una adicción sin sustancia pero donde la carga genética va a haber, que tenemos que empezar a explorar y hacerle ver a los niños, la carga genética, la adicción puede ser a las drogas, alcohol y al juego también.” señaló.