Estudian las profundidades del Golfo de México

Un grupo de investigadores logró el gran cometido de estudiar el Golfo de México a tres mil quinientos metros de profundidad.

El equipo encargado de tal hazaña estuvo conformado por el consorcio CIGOM, especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México y del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del núcleo de Mérida.

La expedición fue hecha a través del buque oceanográfico Justo Sierra de la UNAM, del 5 al 20 de junio; Cecilia Enríquez Ortiz, investigadora de la referida casa de estudio, explicó que inicialmente tuvieron que estudiar la zona.

“Abarcar una serie de maniobras muy complicadas, estudiar el agua, la salinidad, y las columnas de agua, y el movimiento cómo general el transporte y ver lo que transporta el mar de organismos microscópicos y macroscópicos”

Enriquez Ortiz señaló que bajaron una red en el lugar conocido como perdido, al frente de las costas de Tamaulipas, donde se logró el estudio a 3, 5 kilómetros de profundidad.

“Bajar ese instrumento que es como una portería de fútbol, eso baja un par de horas en bajar, y luego de dos horas llega al fondo y luego tomar una muestra y luego empezar a subir”

Los especialistas reunidos en la Sala de Junta del Cinvestav en la ciudad de Mérida, detallaron que uno de los objetivos en realizar la investigación fue estudiar las condiciones del mar y su sistema marítimo, ante cualquier explotación petrolera en la zona. Esto, con el objetivo de controlar la actividad y dar recomendaciones para evitar la contaminación en la zona.

“Puntualizar y recordar que en el Golfo de México de forma natural antes que los humanos estuviésemos en la tierra hay emanaciones de hidrocarburos naturales, hay hoyos que salen hidrocarburos. Sería de forma natural sin que haya explotación”

La investigación no solo arrojó resultados interesantes en cuanto al estudio de hidrocarburos, sino pare presenciar por primera vez la fauna que habita en esas profundidades del golfo mexicano. Así lo explicó el investigador Víctor Vidal Martínez

“Es la primera vez en México podemos describir que tenemos en esos ambientes, había pepinos de mar, había erizos, había peces abisales, vimos seis especias diferentes de especies abisales”

El viaje al Golfo de México de la embarcación Justo Sierra de la UNAM, representó la tercera expedición de estos investigadores y forma parte de un proceso de estudio que tiene una duración de 5 años y que cuenta con un presupuesto de mil quinientos millones de pesos.