El Espejo Roto...
14 de marzo de 2017
El próximo 18 de marzo estaremos recordando un acto que unió al país: la expropiación petrolera ejecutada por el presidente general Lázaro Cárdenas. En el año de 1938, el presidente de México decidió afrontar a las petroleras extranjeras que se negaban a obedecer las disposiciones mexicanas. Cárdenas aprovecho la coyuntura de los problemas en Europa, donde la Alemania Nazi ya daba muestras de su intención de manifestarse como la potencia mundial. Al llamado del presidente, el pueblo de México todo, incluyendo la Iglesia Católica, salió a apoyarlo. Hubo quien donó sus pollos, que significaban su riqueza, para aportar, aunque fuera un poco, en esta heroica hazaña por quedarnos con nuestro petróleo. Setenta y nueve años después, México solo produce el cuarenta por ciento de la gasolina que consume.
Entre los restos del espejo roto observamos que la refinería prometida por el gobierno de Felipe Calderón no existe.
Entre los mexicanos es común la creencia de que la corrupción alrededor de Pemex es tan grande como su declive. Hay quien comenta que la capacidad de almacenamiento de la gasolina que el país importa solo alcanza para tres días. Quemamos el gas natural porque no hubo la capacidad de comercializarlo.
Entre los muchos reflejos se observan grupos de delincuentes ordeñando los ductos... robándose la gasolina.
Al recoger un trozo del espejo veo el reflejo del hijo del general, el Ing. Cuahutémoc Cárdenas, durante la presentación de su libro en la Filey, decir que existen posibilidades para deshacer los tratados Guadalupe-Hidalgo, aquellos por los que México perdió la mitad de su territorio ante los Estados Unidos, y por lo tanto pedir a ese país una indemnización o la cancelación de la deuda que se tiene con ellos.
La mayoría de las imágenes promueven escenarios tensos, que agreden, que molestan. Es por ello recomendable levantar la mirada, ver más allá del 18 de marzo y esperar la llegada de la primavera, con la esperanza de encontrar la fórmula que como país debemos seguir para lograr una mayor justicia, un mejor ingreso para nuestras familias y la aplicación del método científico que permita tomar decisiones adecuadas.
Nota escrita por
Bernardo Laris
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"México ahogado en el petróleo"