El asalto a la razón‏

27 de junio de 2014

El asalto a la razón‏

En su columna “El asalto a la razón” de Milenio Diario, el periodista Carlos Marín aborda el polémico audio donde involucra a la diputada perredista Purificación Carpinteyro. A continuación leemos y compartimos con usted de manera textual la columna de Carlos Marín.

Para defenderse del balconeo de la conversación en que habla de los negocios personales que avizora gracias a las reformas legales en telecomunicaciones la tempestuosa Purificación Carpinteyro argumentó ayer con Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula que también la telecracia en el Congreso representa intereses tan legítimos (cabe inferir que suponía) como el suyo

Yerra: en San Lázaro están representadas efectivamente las televisoras (dentro del sector empresarial) como lo están partidos políticos, sindicatos, organizaciones populares, deportistas y uno que otro independiente.

Los diputados debaten en sus fracciones y con las demás a partir de convicciones personales e intereses colectivos, lo que se vuelve ley en votaciones democráticas.

En la tarea legislativa, pues, inevitablemente se proyectan intereses ideológicos políticos y económicos, pero no de individuos, sino de sectores. 

La diputada cree que lo bueno para ella lo será también para el país, pero no: la Constitución define a la Cámara de Diputados como la representación “popular” y no, desde luego, de nadie en lo personal.

Hasta aquí el texto de Carlos Marín.

Al leer este caso, inevitablemente  se nos viene a la memoria aquél audio donde se escucha al ex secretario de comunicaciones y transportes, Luis Téllez, hablando sin empacho de la famosa partida secreta. En aquel año 2009 el nombre de Purificación Carpinteyro sonaba como responsable de filtrar estos audios.

Como dijera Joaquín Lopez-Dóriga  “el que a filtración mata a filtración muere”. 

mantenimiento página web