Días de fieles difuntos y a los ochos días, también

En un intento de no perder las tradiciones del pueblo yucateco, como el Hanal Pixan, se le ha dado más importancia al aspecto turístico que trae la riqueza gastronómica que representa esta celebración, pero es importante no dejar de lado el aspecto espiritual y la importancia de la oración para la travesía de nuestros fieles difuntos, según comentó el padre Jorge Martínez Ruíz, de la Pastoral de Comunicación de la Arquidiócesis de Yucatán.

En este contexto, como parte de la costumbre cristiana, así como hay un novenario que se realiza antes de una celebración, existen los ochavarios, en los que se prolonga la fiesta durante los siguientes ocho días…

“De manera general cuando una persona muere, hay la costumbre también de ofrecerle las misas durante una semana o durante ocho días, que se conoce como ochavario, otras celebraciones a nivel iglesia también existen las famosas octavas, los ocho días; la navidad tiene un ochavario o una octava, la pascual también tiene su octava, su ochavario; tenemos la octava de la unidad por los cristianos que también se celebra en enero entorno a la fiesta de San Pablo, etc”.

Agregó que es una bonita tradición el orar durante ocho días después de que alguna persona cercana o familiar fallezca, o en el caso de los fieles difuntos, a partir del 2 de noviembre, seguir rezando una semana más pidiendo por su eterno descanso.

“A esto también anexamos que en el caso de los difuntos, cuando alguien muere, también, no solamente se hace el ochavario, sino que habitualmente se piden misas por el aniversario mensual, o se va a participar en la misa por su intención o incluso en el aniversario luctuoso también, hay gente anualmente pues va a rezar la intención de la Santa Misa para recordarlo”.

 Por último, exhortó a los católicos a que vivan el Hanal Pixán, no sólo como un folclor sino vivirlo con la oración también.