Deficiencias dentro y fuera de unidad deportiva de Valladolid

La Unidad Deportiva de Valladolid requiere mantenimiento no solo en sus instalaciones sino también en sus inmediaciones. 

En un recorrido por la Colonia Fernando Novelo, donde apenas los trabajos de bacheo se notan por las calles en mal estado, puede observarse que gran parte de la banqueta está desgastada y rota. 

A la altura de la calle 27, cerca de la entrada principal, la malla de metal está saltada y eso representa un riesgo para los peatones, indican estudiantes que pasaban caminando por el sitio. 

De acuerdo con los vecinos, la gente esquiva esa parte de la banqueta para no tropezar, pero desafortunadamente al bajar también corren peligro porque la calle es muy transitada. 

Por si fuera poco un registro de unos 70 centímetros de largo no permite que la banqueta sea transitable, ya que al pisar la tapa de concreto esta podría desfondarse además de no estar bien colocada. 

A la vuelta, sobre la 22, persiste una alcantarilla obstruida y el acumulamiento de agua en la calle es constante las veces que ha llovido, dicen los vecinos. 

Cerca de ahí hay cocinas económicas y negocios que se ven perjudicados porque el encharcamiento es un foco de infección por el lodazal que tarda en secarse. 

Más adelante, se observan banquetas carcomidas y calles desgastadas, llenas de maleza y basura que finalmente van a dar a los pozos pluviales. 

Pero volviendo a las instalaciones del centro deportivo, los artefactos para hacer ejercicio que ahí se encuentran están oxidados casi en su totalidad siendo inutilizables por las personas que acuden a hacer deporte. 

NotiRASA