Conmemora IMSS el Día Mundial de la Hepatitis el 28 de julio.
26 de julio de 2013
La Organización Mundial de la Salud (OMS) designó el 28 de julio como el Día Mundial de la Hepatitis, con el objetivo de asegurar una oportunidad para la educación y mayor comprensión de esta enfermedad, además de verla como un problema de salud pública y de esta forma fortalecer las medidas de su prevención y control informó la doctora Brenda Herrera, gastroenteróloga del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán.
De acuerdo a la doctora las hepatitis B y C causan la muerte de más de un millón de personas cada año. Contrario a la hepatitis C, la B puede evitarse mediante la vacunación.
La doctora señaló que los diferentes virus de la hepatitis causan infecciones e inflamación del hígado, mismas que pueden desembocar en cirrosis o cáncer hepático. Puede comenzar y mejorar rápidamente (hepatitis aguda) o puede causar una enfermedad prolongada (hepatitis crónica).
El IMSS informa que la hepatitis A es causada generalmente por la ingestión de agua o alimentos contaminados, mientras que las formas B y C se producen por el contacto con fluidos corporales infectados: relaciones sexuales desprotegidas, transfusiones de sangre o productos sanguíneos contaminados y transmisión de madre a hijo en el parto, son las más comunes.
Los síntomas abarcan: dolor o distensión abdominal,orina turbia y deposiciones de color arcilla o pálidas,fatiga, fiebre (por lo general baja), prurito generalizado, ictericia -coloración amarillenta de piel y ojos-, falta de apetito, náuseas y vómitos, así como pérdida de peso.
Las medidas para prevenir el contagio de la hepatitis B y C son: no prestar artículos personales tales como rastrillos o cepillos de dientes, no compartir agujas, extremar precauciones en caso de hacerse tatuajes y perforaciones corporales, así como el uso de preservativo en las relaciones sexuales.
El instituto aconseja que para reducir el riesgo de contagiar o contraer la hepatitis A, siempre lávese las manos después de ir al baño y cuando entre en contacto con la sangre, las heces u otros fluidos corporales de una persona infectada, así como evitar los alimentos y el agua que no estén desinfectados o usted no esté seguro de la limpieza en su preparación.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) designó el 28 de julio como el Día Mundial de la Hepatitis, con el objetivo de asegurar una oportunidad para la educación y mayor comprensión de esta enfermedad.