Arzobispo de Yucatán celebró su cumpleaños

Con motivo de su cumpleaños número 61 el Arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega celebró una misa en el Seminario Menor,  San Felipe de Jesús en donde estuvo acompañado de 153 sacerdotes, recibiendo como regalo una réplica del Señor de Tlaxcala, dicha entrega la hizo el alcalde de Tlaxco, Jorge Rivera Sosa.

Durante la ceremonia religiosa destacó que debemos ser agradecidos con el don de la vida que Dios nos dio y que uso como instrumento a nuestros padres así como todas y cada una de las personas que han formado parte de nuestra vida.

El Arzobispo se dijo contento de los acontecimientos que le han tocado vivir desde que llegó a tierras yucatecas como ña celbración de la Virgen de Guadalupe y la navidad y ahora su cumpleaños.

Sobre el regalo que recibió expresó que se quedará en las instalaciones del Seminario Menor.

“Han llevado replicas der esta imagen a la provincia de Monterrey diversas Diócesis pero también en el camino de evangelización tlaxcalteca y ahora saliéndose de esta ruta me hicieron el favor de traerla hasta aquí para compartirla conmigo y el pueblo, no quise ponerla en otro templo donde este el Señor de las Ampollas, pero aquí en el seminario es un buen lugar para estar”.   

Por otro lado Monseñor comentó que en estos días tendrá varias actividades como una reunión de directivos del Consejo Episcopal Latinoamericano en Colombia, así como una participación en el “Foro sobre la Marihuana” organizado por la Universidad Pontificia de México, sobre este tema dijo que el uso de esta droga para ayudar a la salud es bueno, pero no cuando se hace de forma lúdica.

“En la iglesia todos tenemos un solo punto de vista y estamos a favor de la salud del ser humano y sabemos que usada solo como diversión puede traducirse en graves problemas de salud y al contrario si se utiliza adecuadamente para la salud puede ayudar a esas personas que no encuentran salvación a su enfermedad, lo que sea uso terapéutico bienvenido con todas las precauciones y lo que sea  uso terapéutico bienvenido y lo que sea ruso lúdico que no se anime más”.

Al término de la ceremonia el Arzobispo compartió los alimentos con los sacerdotes que lo acompañaron en la misa.