Anhela un cuarto dormitorio para mejorar la condición de vida de su esposa y nieto

A esta redacción llegó don Ermilo Cano y Canché, un abuelito de 75 años de escasos recursos, que vela por su esposa y nieto, ambos enfermos y con discapacidad.

A su edad, él dice que ha vivido en carne propia la gran responsabilidad que conlleva atender a dos personas enfermas en su endeble casa a base de maderas, bolsas, cartón y láminas.

Este miércoles su esposa cumplió años y pidió que la felicitaran a través de los micrófonos de Cadena RASA; y también habló de su nieto que por un accidente hace 18 años no puede caminar teniendo que atenderlo por completo.

Comenta que desde hace muchos años anhela una casa de concreto, de esas que dan por el gobierno, un pie de casa, un cuarto con condiciones especiales para su esposa que se ha caído varias veces y para su nieto que está postrado.

Con la voz entrecortada, todavía tiene la esperanza que alguna autoridad lo ayude como a otras familias del pueblo del cual es fundador.

Don Ermilo estará gustoso de recibir la ayuda de alguna autoridad en turno, porque cada vez que hay campañas electorales tocan la puerta de su casa y escucha a todos, pero nadie le cumple lo que le promete.