Recuperan la "piel" del Cristo de Popolá
31 de agosto de 2015
El cristo del Amor de Popolá fue sujeto a trabajos de conservación y restauración durante seis semanas por parte de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), a petición del párroco ya que con el paso del tiempo comenzó a “descarnarse” esta pieza que mide 1 .65 m de alto y 1.60 de ancho con los brazos extendidos, informó la restauradora Natalia Hernández Tangarife, del Centro INAH-Yucatán.
Dijo que el Santo Cristo del Amor, como también llaman a la obra, no presentó problemas estructurales, pero en el aspecto estético estaba, literalmente, deteriorada, el estado de conservación de la capa pictórica era delicado: estaba perdida en cerca del 30 por ciento de la superficie a causa del uso que se le dio. Por costumbre, antes de la fiesta se le daba una limpieza empleando tomate, agua bendita y talco; todo ello ocasionó abrasiones.
Los trabajos fueron financiados mediante el Programa de Desarrollo Cultural Municipal, en el cual convergen recursos de los ayuntamientos, del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y de la Secretaría de la Cultura y las Artes estatal.
Fue hace dos siglos que este gran Cristo llegó a la comisaria vallisoletana y desde entonces los pobladores han depositado su fe en él, y en su honor se realiza una feria cada dos años, a mediados de enero.
Esta escultura policromada data del siglo XVIII. Originalmente, se sabe, estuvo colgada en alguna otra iglesia de Valladolid, pero 200 años atrás fue llevada, por razones desconocidas, a Popolá, localidad que la adoptó de inmediato como su imagen de mayor devoción, pese a que el patrono es San Francisco de Asís.
Escucha la nota
La capa pictórica se había perdido en 30 por ciento de la superficie de la obra, que fue atendida por especialistas del INAH