Pescadores toman medidas contra la delincuencia

Las costas y mares yucatecos han sido testigos durante este 2015 de una serie de actos violentos, que han dejado a todos los pescadores preocupados por su seguridad, desde robos a bodegas, asaltos a mano armada a barcos que se encontraban pescando en alta mar así como el robo de motores a embarcaciones, dando como saldo más de 10 toneladas perdidas de pepino de mar y 1.5 toneladas de langosta, equivalente a más de 7 millones de pesos.

El presidente de la Federación de Cooperativas de la Industria Pesquera del Centro Poniente el Estado, José Luis Carrillo Galaz, manifestó que tienen la sospecha que tanto los robos como los asaltos en alta mar han sido realizados un mismo grupo de personas, a las que la policía ya les sigue la pista.

Indicó que la captura del pepino de mar marca “un antes y un después” en la pesquería de nuestra entidad ya que su alto valor en el mercado y su abundancia aumentó el número de personas interesadas en trabajar en aguas yucatecas incluso de otros estados, “prostituyendo el ambiente”.

“Creo que el pepino de mar vino a traer cambios y transformaciones, mucha gente foránea llegó y trajo consigo mucha transformación, en muchas comunidades prostituyéndose el ambiente, sumado al costo que tiene el producto que es de gran valor adquisitivo”, señaló.

Debido a la tensión en el ambiente, los pescadores han decidido tomar algunas medidas precautorias para evitar que los actos vandálicos se sigan repitiendo, actualmente los pescadores procuran salir en grupos a pescar y mantenerse cerca durante sus jornadas, además intentan realizar sus actividades durante el día y regresar antes de que se oculte el sol y siempre llevar consigo aparatos de comunicación que les permita hacer contacto con las autoridades en tierra, por mencionar algunas.

Sin embargo aseguran que dichas medidas no son suficientes, por lo que solicitan a las autoridades aumentar la seguridad en el mar, así como realizar una reunión con entidades del ámbito municipal, estatal y federal, para crear nuevos planes de acción que permitan a los pescadores desempeñar sus actividades con garantía de seguridad.

“Necesitamos una reunión inmediata donde estén presentes todas las instancias que tengan que ver con la seguridad, creo que es el tiempo adecuado o más tarde lo podemos lamentar, lamentar hechos más allá del robo”, agregó.

De la misma manera están proponiendo a CONAPESCA y al Gobierno del Estado la realización de un censo sobre el número de pescadores y embarcaciones, para tener un panorama real de la situación y detectar quienes se dedican a esta actividad de manera ilegal o que no se encuentren regularizados.