Niños alegran la fría tarde

En punto de las 16:00 horas varios centenares de niños y niñas se reunieron para iniciar con el primer día de desfiles del Carnaval Mérida 2016, en el que las comparsas lucieron trajes con colores de fiestas, sombreros con plumas, espalderas decoradas, que atrajeron la atención de los cientos de espectadores que se reunieron para ver el tradicional desfile.

Aunque en un principio se temía la cancelación de la fiesta infantil del rey momo, esto debido a una muy ligera  llovizna que comenzó a caer la tarde del jueves como consecuencia de la entrada del frente frio número 34 que afecta a la entidad, sin embargo oportunamente para los pequeños, la lluvia cayó después del paseo  y dio pauta para que se llevara al ritmo de la música y diversión que solo ellos.-los niños- saben ponerle.

El desfile tuvo una duración 45 minutos, e inicio en las puertas del Palacio Municipal, finalizando 4 calles posteriores hasta llegar al Parque de Santa Lucía, durante el desfile estuvieron presentes los reyes infantiles Ana Victoria Pinto Sáenz y Wafiq Antuan Abdala-Iza Álvarez, quienes interactuaron con el público y los cuerpos de baile, dándoles un toque de humor y felicidad.

Cabe destacar, que en este tipo de espectáculos, las madres de familia juegan un papel importante a la hora de los preparativos para este día, y es que muchos de los trajes son diseñados y confeccionados por ellas mismas, muchas veces desde varios meses con anterioridad, por lo que el ver a su hijo o hija desfilando,  es sin un duda un grato momento de felicidad para la mayoría de ellas, que debido al entusiasmo de sus retoños muchas no dudaron en soltar una lagrima, o sacar al menos el teléfono celular, tomar una foto y guardar el momento.

Para finalizar, en total participaron casi 20 comparsas del mismo número de instituciones de Educación Preescolar, que todos juntos al ritmo de géneros como la salsa, la cumbia y el reggeaton pusieron a la práctica las coreografías que ensayaron con tiempo atrás, sin embargo como es común y debido a la espontaneidad que tienen los niños, muchos de ellos a la hora del desfile improvisaron sus pasos, mientras que otro tanto por  la pena, opto por mejor ya no bailar.