Narran historia de la cruz que evito desgracias

Definitivamente la convivencia entre vecinos puede ser muy difícil, pues como dicen cada cabeza es un mundo y cada uno tendrá sus ideologías, pero no siempre es así y hay vecinos como el señor , Enrique Guillermo Molina,  de la colonia Miraflores, quien hace más de 25 años, movido por la fe, cambiaría un rinconcito de su colonia.

Justo en la avenida 69, había un cruce muy peligroso, que causaba accidentes viales, por lo que el señor Enrique quien tiene gran fe en la Santa Cruz decidió colocar una para que estos disminuyeran.

“Por dónde está la Capilla habían muchos accidentes muchos problemas, porque la carreta era muy angosta, nosotros pusimos una cruz dónde hubo una ceiba, empezamos hacer nuestras reuniones”.

Comentó que con el tiempo los vecinos fueron adecuando ese espacio con techo de láminas, e increíblemente los accidentes fueron disminuyendo, dijo que quizá por respeto a la cruz manejaban con más precaución.

El terreno que era un lote baldío fue donado por el gobierno del estado cuando dulce María Sahuri Riancho, era gobernadora, y así poco a poco ese lugar fue convirtiéndose en importante y especial para los vecinos del rumbo.

 “Un ciclón nos lo botó, los vecinos poco a poco nuevamente comenzaron a cooperar con bloques, tierra, para construir lo que es hoy, la gente de ese tiempo ya creció y hoy en día siguen llevando a sus hijos”.

Ese pequeño rinconcito es ahora una capilla en forma, con más de 200 feligreses que acuden a las misas y al catecismo, pues la iglesia de santa María Goretti ha tomado las riendas del lugar y el padre Rafael Pat es quien ofrece las misas los domingos a las 11:30 de la mañana.

De hecho hace unos días el señor Enrique y su esposa celebraron con una misa en esa misma capilla  sus 45 años de casados.