La remodelación del Centro Histórico de Tizimín no ha concluido por completo debido a las lluvias

Las lluvias no han permitido a los trabajadores de la constructora encargada de la remodelación del Centro Histórico de Tizimín, terminar la obra.

Aunque ya se abrió la circulación vehicular alrededor del parque principal, la banqueta y parte de la calle 53 con 52 sigue a medias, apenas este martes se coló la base del concreto estampado, que se veía amenazado con deslavarse por el agua. Debe esperarse a que deje de llover o, al menos, que haya días soleados para que seque bien el material para aplicarle los acabados.

Las autoridades dijeron que prácticamente la obra está lista, de no ser por esa parte inconclusa, antes descrita.

La gente puede caminar sin problema en el parque e ir a la iglesia, al palacio o a las tiendas de la zona sin dificultades; se pueden sentar en las nuevas y modernas bancas, las luminarias funcionan de manera correcta, inclusive ya se encendieron las de las letras gigantes. Las señales de tránsito fueron colocadas.

Las primeras lluvias pusieron a prueba el nuevo sistema de drenaje de la costosa obra; no se encharcó ni hubo problemas con la fluidez del agua, pese a que ha sido constante el mal tiempo.

Por otro lado, el agua que ha caído es favorable para las áreas verdes del primer cuadro de la Ciudad de Reyes, pues los árboles, arbustos y flores que se sembraron ahí se adaptan más rápido en los jardines que dan vida al entorno.